Son muchos los periodistas que viajaron en su momento a Qatar para cubrir el mundial que se está llevando adelante en el mencionado país. Una de las comunicadoras que viajó desde Telefe, fue nada más y nada menos que Noe Antonelli, integrante de «A la Barbarossa«, el ciclo que lleva adelante Georgina Barbarossa también a través de la señal de las pelotas.
Ahora, la panelista decidió contar su experiencia en diálogo con La Once Diez/Radio de la Ciudad. «Es todo muy complejo, no le facilitan nada a la prensa, te roban tiempo que es oro, porque capaz tenes la puerta al lado y tenes que dar una vuelta de cuatro kilómetros. Tienen muchos ‘no’ los que organizan acá el Mundial. Ni bien llegamos se percibía otro Qatar, en Rusia pasó algo parecido por lo organizativo, creo que se relajaron un poco a medida que vieron que todo funcionaba bien», señaló.
«Lo que sí creo es que cuando vuelva a Argentina voy a valorar muchísimo más las libertades que tenemos, estamos acostumbrados a muchas cosas que acá no son derechos, desde cómo ir vestidos hasta tomarse una cerveza en la calle. El tipo que nos manejaba la combi, por ejemplo, nos llevaba y nos hacía sentar atrás. Nosotras nos empezamos a sentar adelante y creo que les estamos contagiando un poco la libertad», reveló Noe Antonelli.
Tajante
«Es tremendo vivir esta cobertura, estamos viviendo al revés de todo el mundo, terminamos de trabajar habitualmente a las 5 de la mañana, por ahí dormimos hasta las 11 de la mañana y arrancamos a trabajar a las 15. Pero es la única manera de coordinar con los medios argentinos, sino dosificamos la energía no aguantamos. En lo personal me impacta lo que puedo generar produciendo contenidos de viaje dentro de una cobertura, lo disfruto mucho», destacó la periodista de Telefe.
«Esto no es nada fácil, y todas las coberturas para todos los programas son distintas, estamos tratando por ejemplo, de traer el espíritu de la Peña de Morfi, acá al Barwa village que es como el lugar donde viven los argentinos que vienen con lo justo. De hecho, al Barwa le dicen ‘la carcel’ porque tiene como pabellones, horarios para entrar y salir, es difícil llegar hasta acá. Y son los que están poniéndole más onda a la hinchada y uno de los chicos consiguió un andamio, llevamos una banda de música y un costillas y llevamos a cabo una escena de felicidad total, tenemos muchas cosas para celebrar”, sentenció.
