Brasil reevaluará los procedimientos de seguridad para la asunción del presidente electo Lula da Silva, luego de que un explosivo fuera desarmado el sábado, cerca del aeropuerto internacional de Brasilia. El nuevo ministro de Justicia, Flavio Dino, expresó que todos los métodos en la toma de posesión, que se llevará a cabo el próximo domingo, «serán reevaluados, con miras a reforzar la seguridad».
«La toma de posesión del presidente Lula se realizará en paz. La democracia ha ganado y ganará», agregó. La policía militar de Brasil confirmó que un explosivo fue encontrado dentro de un camión de combustible. Una persona, que confesó su intención de delinquir en Brasilia, fue detenido la noche del sábado, según la policía civil.
El hombre era seguidor del actual presidente Jair Bolsonaro. «Se intensificará la lucha contra los terroristas y los alborotadores», dijo Dino. Los bolsonaristas han acampado fuera de las bases del Ejército en Brasil durante semanas, instando a los militares a revocar la victoria del presidente electo.
La noticia de la bomba añadió una nueva dimensión a la violencia postelectoral en Brasil. Las tensiones siguen siendo altas después de las elecciones más reñidas del país. Bolsonaro, que aún no ha reconocido su derrota, ha hecho afirmaciones infundadas sobre la credibilidad del sistema de votación de Brasil. Muchos de sus partidarios más acérrimos le creen, informaron Bloomberg y Reuters.
El jefe del tribunal electoral de Brasil rechazó el mes pasado una denuncia de los aliados de Bolsonaro que impugnaba la elección presidencial. El jefe de la Policía Civil en Brasilia, Robson Cândido, confirmó que un hombre de 54 años fue detenido. Él mismo, habría confesado haber colocado el artefacto en un camión de combustible cerca del aeropuerto de Brasilia para «sembrar el caos».