Gustavo Sylvestre, periodista y conductor de TV, manifestó que los festejos de la Selección Argentina y el pueblo en las calles de la Ciudad de Buenos Aires representó un diciembre positivo frente a un sector de la sociedad que siempre desea que al país le vaya mal. Por otro lado, Sylvestre responsabilizó al presidente de la AFA, Claudio Chiqui Tapia, por no aceptar el traslado del equipo nacional a la Casa Rosada.
«Nada puede borrar lo que fue la jornada de ayer que fue impresionante. La sociedad argentina le dijo a estos diarios como Clarín y La Nación y la dirigencia política en general que quedaron muy mal parados frente a la inmensísima mayoría. Algo nunca visto en la Argentina y me arriesgaría a decir que en el mundo. Nunca hubo una manifestación de esta naturaleza para recibir a una selección campeona del mundo», comentó Sylvestre en Radio 10.
«Frente aquellos que criticaban el feriado nacional… 6 millones de personas movilizadas en el AMBA no les hizo mal. Se hizo en un marco de alegría permanente sin incidentes. Solamente hubo 18 heridos leves que se cayeron de algún lugar donde estaban mal subidos. Los comportamientos individuales de una comunidad organizada en algún momento habrá que aprenderlos», indicó el exconductor de A Dos Voces.
«Las dos personas que se tiraron dentro del micro peligró la vida de algunos jugadores y fue lo que definió que la caravana se parara. El colectivo no reunía las condiciones ni de seguridad y comodidad para que se pueda dar. Hubo gente que se quedó en la Plaza de Mayo pensando que los jugadores iban a ir al balcón como habían quedado el Gobierno nacional con el Chiqui Tapia desde el inicio, después Tapia decidió no ir a la Casa Rosada», expresó el actual conductor de C5N.
La furia de Sylvestre con el presidente de la AFA
«Si Chiqui Tapia quiere ir por el récord de Julio Grondona, Dios nos libre… hasta eso la verdad hoy me importa un bledo. Hoy el diario Clarín dice que Messi no quiso ir a la Casa Rosada… y bueno, pero la gente se retiraba super feliz y es lo que hay que guardar en las retinas. Era la necesidad de un diciembre diferente frente a los antipatria que desean siempre el mal«, concluyó.