El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, disparó durante el 2022 decenas de misiles a un ritmo récord, bajó el umbral para el uso de armas nucleares y burlándose de las sanciones occidentales. Se espera que Kim describa sus planes para el 2023 en los próximos días, cuando su gobernante Partido de los Trabajadores concluya una importante reunión de definición de políticas de fin de año.
Kim Jong Un anunció durante una reunión que fortalecería el ejército, pero los detalles no se conocerán hasta antes de Año Nuevo. Con pocas amenazas de nuevas sanciones y planes ya en marcha para desarrollar aún más armas, es probable que el líder norcoreano busque continuar perfeccionando su capacidad para lanzar un ataque nuclear creíble contra Estados Unidos y sus aliados.
Durante la reunión, el político manifestó su firme creencia en «la dirección de la revolución coreana y la confianza en su invencibilidad», informaron este jueves los medios estatales locales. El régimen de Kim ha desafiado las resoluciones de la ONU al disparar alrededor de 70 misiles balísticos en lo que va de 2022.
Estados Unidos, Corea del Sur y Japón prometieron un castigo severo y coordinado si Kim prueba un arma nuclear. Ahora casi no hay posibilidad de que Rusia o China, que tienen poder de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU, apoyen nuevas medidas contra Corea del Norte, como lo hicieron en 2017, informó Bloomberg.
Washington ha manifestado que Rusia incluso puede estar ayudando financieramente a Corea del Norte al comprar armas que podría usar en la guerra de Vladimir Putin contra Ucrania. Pyongyang ha desestimado la acusación como un rumor sin fundamento, pero también ha restablecido su único enlace ferroviario con Rusia, que se detuvo hace casi tres años debido al coronavirus.
