"Mi Messi": el emotivo comentario de Jonatan Viale tras el triunfo de Argentina ESPECTÁCULO El Intransigente

ESPECTÁCULO

«Mi Messi»: el emotivo comentario de Jonatan Viale tras el triunfo de Argentina

Jonatan Viale le dedicó el triunfo a su padre Mauro Viale, fallecido hace poco más de un año de coronavirus.

La tristeza de hace 8 años, cuando la Selección perdió la final del mundial contra Alemania, quedó para siempre atrás con lo que pasó el domingo 18 de diciembre. Jonatan Viale recordó las sensaciones pasadas y las presentes, y por ello realizó un emotivo comentario dejando de lado las internas, la crisis económica y la política. Hoy, lo único importante es el triunfo de Argentina.

«Nunca había visto campeona a mi Selección, a mi país, a mi Messi. Ahora podemos decir ‘mi Messi, nuestro Messi‘. Che, apropiémonos de Messi, qué linda persona para apropiarse, en todos los sentidos. Messi es nuestro», expresó en su columna editorial de Radio Rivadavia. Sobre ello, recordó las palabras de Mauro Viale, su padre y reconocido periodista, cuando fue la final de Brasil 2014: «Tranquilo, yo sé que la va a ganar».

«Yo me enojé porque pensé que me estabas consolando como un padre a un hijo. Pensé que me estabas mintiendo para dejarme tranquilo y te contesté mal. Y vos me miraste… lo sabías, porque habías visto 18 mundiales, porque habías relatado el gol de Diego a los ingleses. Sabías que en algún momento esto iba a pasar», amplió y lamentó tanto el fallecimiento de Maradona como el de su padre.

Emociones de Jonatan Viale y de un país entero

Jonatan Viale también confesó sus emociones cuando Gonzalo Montiel anotó el penal de la gloria. Al contrario de otros hinchas y de sus seres queridos, explicó que no se levantó, sino que sintió «una fuerza extraña» que lo hizo retroceder mientras estaba sentado. «Gol para que reviente el corazón de 47 millones de argentinos y gol para que se callen estos amargos que hasta ayer seguían criticando a Messi. Y gol para demostrar que no hace falta insultar ni agredir», reflexionó.

En conclusión, el partido de ayer no solo fue uno de fútbol, sino la luz luego de momentos prolongados de suma tristeza con la pandemia, la cuarentena y la pobreza. «Lo de ayer superó todo porque no solo era mi alegría egoísta, era la alegría de mi hijo más grande y del más chico. Y ahí entendí todo. ¿Para qué sirve este deporte tan raro, cómo puede ser que un país se paralice para ver a 22 tipos corriendo? Es una vida tan complicada que uno necesita alegrías».

Salir de la versión móvil