El día jueves Victoria Donda dejó su cargo como interventora del INADI y se generó un revuelo dentro del oficialismo. Sin embargo, este viernes, desde el Ejecutivo hicieron saber que el Presidente había perdido la confianza en la exfuncionaria. Ante ese clima de desconfianza, Donda prefirió abandonar su cargo dos días antes de que culmine sus funciones en el organismo.
En 24 horas el Gobierno sufrió un cimbronazo por la salida de tres funcionarios: Victoria Donda, Rodolfo Gabrielli, titular de la Casa de la Moneda; y Félix Crous de la Oficina de Anticorrupción. La salida que más resonó en el seno del Frente de Todos fue la de la extitular del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI).
En la mañana del viernes, la secretaría de Gabinete, comandada por Juan Manuel Olmos, señaló que Alberto Fernández perdió la confianza en Donda para que siga al frente del organismo. «Es necesario aclarar que los motivos transmitidos en dicha conversación fueron la pérdida de confianza del titular del Poder Ejecutivo en la capacidad de la Dra. Victoria Donda de seguir al frente de la gestión de dicho organismo», expresa el comunicado.
Al saber que su futuro estaba fuera del INADI, la exfuncionaria tomó la decisión de irse antes de que se le termine su mandato. El 31 de diciembre el jefe de Estado debía decidir si continuaba con la misma interventora o la modificaba. Finalmente la salida voluntaria de Donda le ahorró al Presidente el trabajo aunque ya estaba sentenciado el futuro de la saliente directora.
«Por otro lado, sobre las críticas públicas que la ex funcionaria realizó de la gestión nacional que encabeza el Dr. Alberto Fernández y que ella integró desde el 10/12/2019, es un derecho que la asiste como a todo militante político y no existe obligación alguna de tener un cargo público para realizarlas«, concluye la misiva que se redactó desde Casa Rosada.