El Gobierno nacional acordó con las prepagas de la Argentina a través de un decreto presidencial un plan de salud con un 25% de descuento en la cuota mensual, pero con copagos para ciertos servicios salud. Por ahora, las entidades de salud están a la espera de la aprobación de los nuevos planes que deberán presentar ante la Superintendencia de Salud nacional.
«Habrá planes de salud de las prepagas con un 25% de descuento, pero para aquellos que tengan visitar al profesional médico van a tener que pagar un copago más allá de la cuota mensual de la prepaga. Los que no pagan copago son las embarazadas, personas con discapacidad, menores de 3 años, pacientes oncológicos o los casos de urgencia», señaló el periodista de La Nación+, Eduardo Serenellini.
«Las prestaciones en las que las entidades de salud podrán cobrar un copago son en consultas médicas, psicología, prácticas de laboratorio, pruebas diagnóstico-terapéuticas, prácticas de kinesiología o fisiatras, prácticas de fonoaudiología, atención domiciliaria, odontología», explicó Serenellini con una filmina que detallaba toda la información en pantalla.
También los copagos serán para los servicios de segundo nivel como Tomografía Axial Computarizada (TAC), Resonancia Magnética Nuclear (RMN), Radio Inmuno Ensayo (RIE), laboratorio biomolecular, genético, medicina nuclear, estudios de imágenes que requieran preparación previa o uso de medio de contraste, prácticas endoscópicas diagnóstico-terapéuticas, pero se excluye aquellas neuroquirúrgicas y cardiovasculares.
«Hoy las prepagas buenas con una cobertura media para un matrimonio superan los 100.000 pesos al mes. Son números realmente elevados. Hoy con la inflación estamos perdiendo calidad de vida e incluso cobertura de salud. Si pagamos una carga impositiva importante, entonces que nos den desde el Gobierno una cobertura de salud pública lógica», arremetió el cronista.
«La prepaga necesita más ingresos y en el otro extremo cuando vas al médico no te acepta la prepaga porque dice que le tardan en depositar. Los profesionales te dicen que ya no quieren trabajar en las clínicas por la falta de dinero. El tema de fondo es la distorsión en la economía argentina por el costo cada vez más elevado y la inflación en el medio», concluyó Serenellini.