Alberto Fernández realizó una reunión de Gabinete nacional en Chapadmalal con las funcionarias más influyentes de la gestión actual para analizar y encarar el 2023 con una agenda de «políticas públicas transversales». Las ministras más destacadas del peronismo fueron Victoria Tolosa Paz de Desarrollo Social y Kelly Olmos del Ministerio de Trabajo que se sentaron junto al presidente en la extensa mesa. La mujer más trascendente del Gobierno, Cristina Kirchner, no participó del encuentro.
«Mantuve un encuentro de trabajo con ministras y funcionarias en el que analizamos los proyectos y políticas públicas para este 2023. Las invito a encararlo con mucha fuerza y convicción, sabiendo todo lo que hicimos y trabajando por mucho más para mejorar la vida del pueblo», sentenció con alegría Fernández en su cuenta personal de Twitter.
«En el Salón Mirador las funcionarias realizaron un encuentro de trabajo donde consensuaron los lineamientos para fortalecer una agenda 2023 transversal con perspectiva de género, con ejes en la producción, el empleo y la importancia de la presencia del Estado para concretarlas», expresó la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, que también estuvo presente.
En ese sentido, el mandatario argentino instó a cumplir con la «utopía de la igualdad para que todas y todos los argentinos puedan cumplir su sueño» y además pidió avanzar con todos los «temas de género y diversidad pendientes». Tolosa Paz, también dejó un mensaje sobre la reunión y dijo: «Secretarias, presidentas y titulares de instituciones, asesoras… todas mujeres valientes que decimos presente, convencidas de la tarea clave que tenemos por delante: la recuperación de la Argentina, derechos y felicidad para todo el pueblo».
Sin embargo, los usuarios en Twitter no pudieron ocultar su enojo por los datos negativos de la economía. «Con una inflación de 95% y un dólar blue a 370 los trabajadores no vemos el trabajo que están haciendo», señaló un cibernauta totalmente enojado y otro tuitero agregó: «Esa mesa me recuerda a la del hambre o a la de la festichola clandestina en Olivos. Memoria».