Máximo Kirchner fue un protagonista efímero en su visita al Congreso de la Nación. El referente del Frente de Todos y líder de La Cámpora, se lo vio en el recinto legislativo apenas unos minutos. Un cuarto de hora fue lo que duró su presencia. Se acercó hasta el Palacio Parlamentario para firmar el dictamen de un proyecto y se retiró en plena comisión.
El hijo de la vicepresidenta en el último tiempo ha tomado una posición que pocas veces se lo vio. Últimamente se encuentra al margen de todo lo que sucede en el Gobierno nacional y la política argentina. En un año electoral, su presencia es importante para la coalición oficialista. Sin embargo, hasta el momento, prefiere pasar por desapercibido y así lo demostró este miércoles.
En el Congreso se estaba debatiendo en la Comisión de Recursos Naturales. Máximo Kirchner es miembro de la comisión y por eso tuvo que dar el presente. Lo cierto es que su presencia tan solo duró 15 minutos. Según informó NA, llegó tarde al evento parlamentario y se fue en medio de las exposiciones que estaban dando los presentes.
El líder de La Cámpora debía estar obligatoriamente por ser miembro y porque el oficialismo debía tener asistencia perfecta para poder comenzar con la labor legislativa. El legislador kirchnerista quedó en evidencia por la demora de una hora y su breve paso por el lugar. Finalmente, con su rúbrica se pudo iniciar la comisión que pretendía el Frente de Todos.
El oficialismo también contó con la ayuda de la diputada de Identidad Bonaerense Graciela Camaño, quien había garantizado su presencia horas antes a través de Twitter. «Por supuesto que voy a estar en mi lugar de representación. El tema lo amerita sobradamente«, había escrito la histórica legisladora, muy crítica de la estrategia de Juntos por el Cambio de vaciar las comisiones
