Rusia declaró el martes que sus fuerzas habían tomado el control de Blahodatne, un pueblo situado justo al norte de Bajmut, en el este de Ucrania, donde se han producido algunos de los combates más intensos de la guerra en las últimas semanas. «Blahodatne, a unos 5 kilómetros al norte de Bakhmut, fue capturado con la ayuda de apoyo aéreo», dijo el Ministerio de Defensa de Moscú.
Reuters no pudo verificar de forma independiente el relato ruso sobre el campo de batalla. El Grupo Wagner, designado por Estados Unidos como organización criminal transnacional, ya había dicho el sábado que sus unidades habían tomado el control de Blahodatne, pero Kiev afirmó que había repelido un ataque contra el pueblo.
Rusia afirma haber tomado el control de varias localidades en torno a Bajmut, donde sus tropas y los mercenarios privados de Wagner llevan meses enzarzados en una batalla de desgaste con las fuerzas ucranianas. Moscú envió decenas de miles de tropas a Ucrania el 24 de febrero del año pasado en lo que llamó una «operación militar especial».
Por otro lado, Rusia afirmó que los llamamientos del presidente de Lituania a suministrar aviones de combate a Ucrania ponían de manifiesto la «posición extremadamente agresiva» de los Estados bálticos y Polonia, y que los «principales países europeos» deberían contrarrestar su postura, informó Reuters.
El presidente lituano, Gitanas Nauseda, declaró que la OTAN debía dejar de trazar «líneas rojas» y suministrar a Ucrania todo el armamento que necesitara, incluidos aviones de combate y misiles de largo alcance. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo a los periodistas: «En general, vemos una posición extremadamente agresiva por parte de los representantes de los países bálticos y Polonia. Aparentemente, están dispuestos a hacer cualquier cosa para provocar el aumento de la confrontación».