El fabricante de autos eléctricos, Tesla, redujo los precios en toda su línea en Estados Unidos y en los principales mercados europeos en el último esfuerzo para estimular la demanda. Los cambios drásticos hicieron que las acciones cayeran, ya que reflejan el dilema que enfrenta la compañía después de no alcanzar su objetivo de entregas de vehículos, a pesar de los descuentos e incentivos de fin de año.
La compañía redujo el costo de su famoso Model Y, el más barato, en un 20%. Y recortó hasta 21.000 dólares de sus vehículos más caros en su mercado local. Tesla también realizó importantes reducciones en países como Alemania, Reino Unido y Francia una semana después de su segunda ronda de recortes en China desde octubre.
Las acciones de Tesla cayeron hasta un 5,8% este viernes por la mañana en Wall Street. El Departamento del Tesoro y el Servicio de Impuestos Internos publicaron pautas a fines del año pasado que irritaron al director ejecutivo Elon Musk, porque el Model Y no pesaba lo suficiente para ser considerado un vehículo utilitario deportivo (SUV).
Eso significa que las versiones de cinco asientos del vehículo están sujetas al límite de precio de 55.000 dólares que se aplica a los sedanes, en lugar del límite de 80.000 dólares para los SUV. La pérdida de ingresos para el 2023 superaría los 11.000 millones de dólares, o el 14% de las ventas, informó Bloomberg.
«Esto ocurrirá si los recortes de precios se mantuvieran durante todo el año, suponiendo que el volumen global estimado sea de 1,8 millones de vehículos», expresó Kevin Tynan, analista automático de BI. «Creemos que Tesla necesitará reducir sus objetivos de crecimiento o mantener y potencialmente aumentar los recortes de precios recientes a nivel mundial, presionando los márgenes», escribió Toni Sacconaghi, analista de Bernstein.