La creación ya confirmada del billete de $2000 no tardó en despertar debates entre economistas sobre el impacto de esta nueva emisión en la economía y lo que esta decisión significa. Mario Blejer, ex presidente del Banco Central (BCRA) opinó sobre la iniciativa de la administración nacional al poner en tela de juicio la inflación. En este sentido, también despejó rumores de hiperinflación, que crecieron en estos últimos meses.
Durante la conversación con Cristina Pérez en Radio Rivadavia, el experto mencionó que «es esperada» la determinación del Gobierno de Alberto Fernández. Asimismo, la calificó como racional al destacar la tendencia alcista de los precios y por cómo el billete de $1000 empezó a valer cada vez menos por la devaluación. No obstante, también destacó que las condiciones económicas del país no son óptimas.
«Creo que es una medida lógica y positiva», subrayó, sin dejar de lado su preocupación. «El rol central que el BCRA juega en la economía es mantener la estabilidad monetaria, de tener una inflación baja. En este momento, la inflación en Argentina es alta, con valores del 100%, no solo en términos de valores absolutos, sino también relativos», explicó.
¿Hay riesgo de hiperinflación?
Otro tema preocupante son las leliqs, que se van duplicando anualmente a las tasas de interés actuales y que, según se dice, pueden desatar una hiperinflación. Consultado sobre ello, el ex titular respondió: «Yo no creo que derive en hiperinflación, no veo un riesgo de que esto se descontrole. Las lebac fueron incorporadas en 2002 como parte de un programa para ofrecerle al público una alternativa en pesos para licuar ahorros en pesos. Si aumenta la demanda por pesos, y no la oferta, eso aumenta la inflación. Pero no por largo plazo conviene esto».
Y continuó: «Hay un error básico de que los bancos centrales son bancos, y no son bancos. No puede abrir usted una cuenta en el BCRA, no da créditos», describió. Por ello, detalló que puede crear situaciones únicas con políticas monetarias, aunque es necesario un equilibrio fiscal. Aun así, a pesar de las críticas por la emisión monetaria, no ve cercano un riesgo de hiperinflación.