El ejército de Estados Unidos derribó este sábado el globo espía chino frente a la costa este del país horas después de que el presidente Joe Biden prometiera “ocuparse” del presunto dispositivo de espionaje. Casualmente, el artefacto apareció surcando los cielos americanos este viernes, el mismo día que el secretario de Estado Antony Blinken debía viajar a China.
Reuters y otras cadenas internacionales informaron de la operación después de que tres aeropuertos del sureste fueron cerrados temporalmente. Si bien las autoridades chinas habían aclarado que el objeto era utilizado para investigaciones meteorológicas, Estados Unidos lo derribó cuando estaba sobre el Oceáno Atlántico, a la altura de Carolina del Norte.
La posibilidad de derribar el globo se venía barajando desde hace varios días, pero se pospuso a pedido del presidente Joe Biden, para evitar problemas en tierra. El globo sospechoso estaba atravesando zonas densamente pobladas a pesar de estar a más de 18000 metros de altura.
Se tensan las relaciones entre Estados Unidos y China
Este sábado, el Ministerio de Relaciones Exteriores chino afirmó a DW que «China nunca violó el territorio y el espacio aéreo de ningún país soberano». Además, agregó que «algunos políticos y medios en Estados Unidos usaron el incidente como pretexto para atacar y difamar a China». Ambos países insistieron en seguir manteniendo abiertos los canales de comunicación.
Wen-Ti Sung, politóloga de la Universidad Nacional de Australia, dijo al mismo medio que el incidente muestra «cuán inestables» son las relaciones bilaterales. «Que un incidente tan relativamente menor pueda descarrilar una visita largamente esperada a este nivel demuestra que todavía les resulta difícil confiar el uno en el otro como socios confiables a largo plazo», apuntó.
Blinken tenía previsto visitar Beijing el domingo para mitigar discrepancias entre las dos naciones. Sería el primer encuentro de alto perfil desde la reunión que mantuvieron los presidentes en Indonesia en noviembre. No obstante, la Casa Blanca canceló abruptamente los planes tras descubrir el globo. El Pentágono rechazó el argumento de los funcionarios chinos.
