La quinta fecha de la Liga Profesional presentó tres polémicas que nuevamente ponen al arbitraje y al VAR en el centro de todas las críticas. En la tarde del lunes, Nicolás Lamolina le anuló dos goles a Gimnasia y Esgrima de La Plata en la derrota frente a Barracas Central. Un partido que se disputó en el mismo horario que se entregaban los premios The Best.
¿Fue mano?
Gimnasia llegó al empate en el marcador a los 42 minutos del segundo tiempo, sin embargo el VAR y el árbitro decidieron anular el tanto. Porque entendieron que la mano de Benjamín Domínguez no podía convalidar el gol de Cristian Tarragona. Aunque el reglamento señala algo distinto. Debido a que si la acción es accidental, no es considerada falta.
¿Se olvidaron de un jugador?
Lo más polémico se produjo en el minuto 11 de descuento. Porque nuevamente el Lobo marcó el empate y otra vez se lo anularon. En esta oportunidad, Nicolás Lamolina sancionó offside de manera inmediata sin previa consulta al juez de línea y llamado del VAR. En la repetición se puede apreciar que Leonardo Morales estaba habilitado por un defensor de Barracas Central que se encontraba detrás del referí.
Las otras polémicas de la fecha
En la noche del sábado, Estudiantes de La Plata empató ante Sarmiento de Junín un encuentro que había comenzado ganando. Y que presentó una jugada que despertó varios enojos. A razón de que Guido Carrillo recibió un codazo en la boca que le provocó la pérdida de tres dientes, y una visita de urgencia a una odontólogo en horas de la madrugada.
Por otro lado, el domingo se registró el empate entre Banfield e Independiente con un acción que podría haber cambiado el resultado. «No se sabe cómo se maneja el VAR y los criterios que toman«, expresó Alejandro Cabrera, del Taladro, en Jogo Bonito. Y esto se debe a que a Santiago Hidalgo no lo dejaron cabecear porque le estiraron la camiseta al punto que estuvo a nada de romperse.