La Ciudad de Buenos Aires volvió a ser este viernes un verdadero caos a raíz de una manifestación sorpresiva sobre la Avenida 9 de Julio. Es que organizaciones políticas y sociales nucleadas en Unidad Piquetera volvieron a las calles en protesta de suspensiones en el plan Potenciar Trabajo. Frente al edificio donde funciona el Ministerio de Desarrollo Social, los movimientos anunciaron más medidas de fuerza para la próxima semana, a desarrollarse en más de 130 puntos de todo el país.
“El martes 7 de febrero salimos en una jornada nacional con cortes de acceso y de rutas desde Tierra del Fuego hasta La Quiaca”, anunció el Polo Obrero. Las organizaciones denuncian que aunque muchos realizaron la validación de identidad “en tiempo y forma” para percibir el Potenciar Trabajo, la cartera de Desarrollo Social no los incluyó para el cobro del mes de enero, que se tenía que hacer efectivo este viernes.
“Ya se han producido casi 160.000 suspensiones del plan potenciar trabajo por lo que estas familias se quedarán sin la mitad de sus ingresos y en marzo les bajarán la totalidad del monto”, dijeron desde la Unidad Piquetera. Y cuestionaron: “El ajuste en los gastos del Estado no sólo afecta a los desocupados, las jubilaciones mínimas que se rigen por salario mínimo están por debajo de la indigencia”.
De igual manera, ampliaron, “los hospitales y escuelas sufren un recorte año tras año, por la vía de la inflación que también se come los ingresos de los trabajadores no registrados o ‘en negro’ que supera el 50 % de los trabajadores activos”. “No hay acceso a la tierra y la vivienda para millones de parejas jóvenes porque no hay obra pública”, reprocharon desde Unidad Piquetera.
Asimismo, la organización disparó contra los movimientos oficialistas nucleados en la UTEP, como Movimiento Evita, Somos y Corriente Clasista Combativa, entre otras. “Se adaptaron a este ajustazo y no abrieron la boca para defender a los compañeros afectados. Creen que la plata ‘ahorrada’ irá para sus cooperativas y emprendimientos productivos, pero el FMI ha reclamado en su memorándum de diciembre que se ajusten las cuentas porque quieren la plata para ellos”, les achacaron.
Por último, advirtieron: “El ajuste no termina en los 160.000 despidos de febrero, el ajuste no se frena ni por la campaña electoral, van a seguir reduciendo el presupuesto porque eso es lo que reclama el fondo”. La medida de fuerza para el martes de la semana entrante tendrá como puntos afectados distintos accesos a la Ciudad de Buenos Aires, como los puentes Pueyrredón y La Noria, además del Acceso Oeste y la Panamericana.