El Ministerio de Salud prohibió la venta, importación y distribución en todo el país de los distintos tipos de cigarrillo electrónico. Esta medida se conoció por medio de una publicación en el Boletín Oficial, donde la titular de la cartera, Carla Vizzotti, indicó que son potencialmente dañinos para la salud y que su avance en la juventud les preocupa como para que siga siendo de acceso libre.
Precisamente se trata de una prohibición a los sistemas o dispositivos electrónicos destinados a inhalar vapores o aerosoles de tabaco. Generalmente, se los conoce como Productos de Tabaco Calentado (PTC) y cuentan con una barra de tabaco (HeatStick) y un dispositivo de calentamiento alimentado por una batería que, al parecer, causa riesgos en los consumidores.
La decisión se tomó “en base a los riesgos que representa” el uso de este tipo de productos. También alcanza a todo tipo de accesorios destinado al funcionamiento de dichos sistemas o dispositivos, como pueden ser los cartuchos y barras de tabaco para ser calentadas que a día de hoy son «productos alternativos» de las tabacaleras pero que su daño es igual.
Los cigarrillos electrónicos «producen aerosoles con nicotina y otras sustancias químicas como el acetaldehído, la acroleína y el formaldehido, las cuales son dañinas y potencialmente dañinas para la salud», explicaron desde el Ministerio de Salud al respecto. Además, afirman que el grado de adicción que produce la nicotina puede «inducir en nuevos usuarios una dependencia de esta droga» como también problemas cardiovasculares, según NA.
Los jóvenes, el grupo más comprometido
Desde la cartera sanitaria explicaron que «la evidencia sostiene que los productos novedosos como los PTCs y similares son especialmente atractivos para niños, niñas y adolescentes, y su introducción en el mercado tiene el potencial de conducir a la iniciación tabáquica en jóvenes y adultos no fumadores, amenazando los logros ya obtenidos en materia de control de tabaco».
De hecho, el Ministerio de Salud detalló que el consumo de cigarrillos electrónicos cuenta con valores cercanos al 1,1% de la población adulta. Sin embargo, en los adolescentes llega al 7% en una población de entre 13 y 15 años. Este consumo alcanzó de forma exclusiva al 3% de los adolescentes, por lo que estos datos que son del 2018 podrían ser cercanos al 21% a día de hoy, aunque no hay estudios realizados.