Uno de los grandes problemas que atraviesa la sociedad argentina es económico. De esa área se encarga Sergio Massa, aunque en los últimos meses sus decisiones no tuvieron el efecto esperado y se agravó la crisis económica. En este marco, Cristina Kirchner sostuvo que estamos en una «economía bimonetaria» en la que conviven el peso argentino y el dólar.
Primero recordó que «el 24 de marzo de 1976, con el modelo de sustitución de importaciones, se inauguró la economía bimonetaria». De allí en adelante este fenómeno se mantuvo y detalló que «hoy en día el dólar es un patrón de conducta porque el modelo de sustitución de importaciones tenía problemas» que se resolvían con las divisas extranjeras.
«Las clases dirigenciales comienzan a formar activos externos en dólares y, por supuesto, tomados de nuestra economía y puestas en el exterior. Esa conducta se trasladó a toda la sociedad, entonces no era solo el empresario que tenía activos afuera sino que la gente, en un mecanismo de defensa, compraban dólares. Se relega el peso únicamente para las cuestiones domésticas y la moneda de ahorro y de pago para determinadas de operaciones es el dólar, como tierras, casas o autos de lujo», explicó.
Seguido a esto, Cristina Kirchner explicó que «a 40 años de democracia no solo no tenemos estado democrático constitucional, sino que estamos sin moneda, estamos en una economía bimonetaria. No critico al que hace eso de ahorrar en dólares, se está defendiendo, defiende su patrimonio pero los dirigentes políticos tenemos que pensar en eso. ¿Qué es ser un dirigente político? Dirigir es ver un poco más adelante lo que va a pasar, deben conducir a la sociedad a lugares buenos y seguros, eso es ser dirigente», agregó.
Cristina Kirchner rechazó la dolarización
Con el fin de solucionar este problema económico, Cristina Kirchner tomó la idea de «dolarizar» el país que propuso Javier Milei. «Dolarización, dicen, esto no se soluciona así. La gente, o una parte importante de la sociedad, se piensa que va a ser como la convertibilidad y no es así. El valor de una moneda no lo da una ley, lo da el tamaño de la economía de un país», indicó desde Río Negro.
«La dolarización, de producirse acá, el que va a tributar y el sacrificio de esa dolarización está en la clase media. Piensen en los que cortan las calles, esos no van a tener problemas si hay dolarización porque el que come una o dos veces al día no consume tanto. La clase media consume el dólar. El empobrecimiento de las clases medias no va a tener límites con la dolarización. ¿Como vamos a tener de moneda algo que emite otro país?, ¿Cuánto va a valer su salario?. Antes de repetir hay que pensar», concluyó.