El Congreso de Perú decidirá el 30 de marzo si acepta una moción para discutir el juicio político a la presidenta Dina Boluarte. Una clara señal de que la crisis política del país está lejos de terminar. El jefe del Congreso, José Williams, explicó que si se alcanzan los votos necesarios para presentar la moción, Boluarte tendrá la oportunidad de defenderse con su abogado en el Congreso.
La moción que solicita la destitución de la mandataria se basa en su supuesta «incapacidad moral permanente» para gobernar el país. La acusación se basa en las decenas de muertos en las protestas antigubernamentales, que llevaron a un grupo de legisladores de izquierda a presentar en enero la primera moción para discutir el juicio político a Boluarte por la violencia.
Prestó juramento como jefa de Estado en diciembre después de que el expresidente Pedro Castillo fuera acusado y arrestado por intentar suspender el Congreso, lo que provocó protestas en todo el país. Para que se inicien los procedimientos contra Boluarte, al menos 52 legisladores, o el 40% de los 130 miembros del Congreso, tendrían que votar a favor de la moción de juicio político.
Entonces se necesitaría el voto de al menos 87 de los legisladores para la destitución formal del presidente, informó Bloomberg. El escenario político en Perú es tan confuso que ni siquiera hay certeza de cuándo se efectuarán las siguientes elecciones.
Las protestas están detenidas tras la ola que dejó 67 muertes desde diciembre, 49 civiles en enfrentamientos, otros 11 como consecuencia de los bloqueos de rutas y seis militares y un policía «en el contexto del conflicto», según la Defensoría del Pueblo.