La Corte Penal Internacional (CPI) emitió una orden de detención contra el presidente ruso Vladimir Putin acusándolo de ser responsable de crímenes de guerra cometidos en Ucrania. Se pidió su arresto por el supuesto traslado por la fuerza de niños a Rusia desde territorios ocupados por las tropas que responden a Moscú en su vecino país.
El Kremlin, según NA, ha negado de forma reiterada las acusaciones de que sus fuerzas hayan cometido atrocidades durante la invasión rusa de Ucrania. Putin es el tercer presidente en ejercicio sobre el que pesa una orden de detención de la CPI, tras el sudanés Omar al-Bashir y el libio Muamar Gadafi. Aunque es poco probable que acabe pronto ante un tribunal, la orden significa que podría ser detenido y enviado a La Haya si viaja a cualquiera de los estados miembros de la CPI.
La CPI emitió la orden bajo sospecha de deportación ilegal de niños y traslado ilegal de personas del territorio ucraniano a la Federación Rusa. El tribunal también dictó una orden de detención contra Maria Lvova-Belova, comisionada rusa para los derechos de la infancia, por los mismos cargos. Rusia no ha ocultado un programa en virtud del cual ha llevado a miles de niños ucranianos a dicha nación. Sin embargo, lo presenta como una campaña humanitaria para proteger a los huérfanos y a los niños abandonados en la zona de conflicto.
La reacción de Rusia
En la primera reacción a la noticia desde Moscú, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso Maria Zakharova se expidió en su canal de Telegram. «Las decisiones de la Corte Penal Internacional no tienen ningún significado para nuestro país, tampoco desde el punto de vista jurídico. Rusia no es parte del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional y no tiene ninguna obligación en virtud del mismo», indicó.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, declaró que Rusia considera «indignantes e inaceptables» las mismas cuestiones planteadas por la CPI. Además, destacó que cualquier decisión del tribunal es «nula y sin valor» con respecto a Rusia, que mantiene la ofensiva contra Ucrania desde hace un año.
Recepción de Ucrania por la medida contra Vladimir Putin
Altos cargos ucranianos aplaudieron la decisión de la CPI y el fiscal general del país, Andriy Kostin, la calificó de «histórica para Ucrania y para todo el sistema de derecho internacional». Andriy Yermak, jefe del Estado Mayor Presidencial, afirmó que la orden es «sólo el principio».
La decisión de la CPI se produjo un día después de que un organismo de investigación bajo mandato de la ONU acusara a Rusia de cometer una amplia variedad de crímenes de guerra en Ucrania, como homicidios intencionados y torturas, en algunos casos obligando a los niños a presenciar vejaciones a sus seres queridos.