La Comisión Europea prometió 1.000 millones de euros para la reconstrucción tras los mortales terremotos en Turquía y Siria del mes pasado, que mataron a más de 55.000 personas. El órgano ejecutivo de la Unión Europea recolectó compromisos en una conferencia de donantes de estados miembros, organizaciones internacionales y otros países durante una reunión en Bruselas.
Los países individuales del bloque también anunciaron nueva ayuda financiera a ambos países, encabezados por Alemania, que dijo que duplicaría su apoyo a 238 millones de euros. «Es imposible que un país, independientemente de su situación económica, haga frente a la magnitud de un desastre de este tipo», expresó el presidente turco Recep Tayyip Erdogan.
El Ministerio del Tesoro y Finanzas de Turquía calculó el costo económico preliminar de los terremotos en más de 100.000 millones de euros. La principal oficina fiscal de Turquía, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Banco Mundial presentaron su evaluación conjunta de daños en la conferencia de este lunes.
«Verá al gobierno turco trabajando con el Banco Mundial, donde Turquía está esencialmente tomando dinero prestado a tasas favorables para financiar la reconstrucción», explicó a Bloomberg en una entrevista el jefe del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Achim Steiner.
«No creo que podamos acercarnos a cubrir las necesidades de lo que se ha estimado hoy. Pienso que se debe pensar en una conferencia posterior para alentar a un grupo de socios más amplios a dar un paso más», agregó. El Banco Mundial ya ha prometido 1.780 millones de dólares en asistencia financiera para los esfuerzos de socorro y recuperación en Turquía, mientras que el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo prometió hasta 1.500 millones de euros durante los próximos dos años.