Un sismo de 5,6 se registró el martes en la región metropolitana de Chile y en la zona central, al sur de Melipilla, y que también se sintió al oeste de las provincias de Mendoza y San Juan. Según informó el Centro Sismológico Nacional (CSN) de la Universidad de Chile, el temblor se produjo por la tarde, a una profundidad de 63 kilómetros. No hubo víctimas fatales.
Solo se produjeron daños materiales, como la caída de mampostería de algunos edificios y también deslizamientos en el cerro San Cristóbal, ubicado en Santiago. Por su parte, el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) descartó por el momento la posibilidad de que se produzca un tsunami, informó NA.
Sin embargo, las autoridades sugirieron a la población que tenga a mano un bolso, en caso de que deban abandonar sus hogares ante una emergencia. Los movimientos telúricos se percibieron a otro lado de la cordillera, a 250 kilómetros al oeste de Mendoza y también a 350 al suroeste de San Juan, por lo que el Instituto Nacional de Prevención Sísimica (Inpres) recomendó mantener la calma y seguir las instrucciones de seguridad en caso de registrarse réplicas.
Además, el organismo está monitoreando la situación de lo que sucede en Chile y proporcionará actualizaciones. Santiago se encuentra permanentemente amenazado, ya que está ubica sobre la falla de San Ramón, un accidente geológico a unos 10 kilómetros de profundidad de la denominada Región Metropolitana.
La falla abarca hasta 50 kilómetros de la capital y se encuentra entre los ríos Mapocho y Maipo, cruza las comunas de Vitacura, Las Condes, La Reina, Peñalolén, La Florida y Puente Alto. Se trata de una falla inversa, por lo que tiene movimientos verticales, y hay registros de sismos que se produjeron allí en los siglos XVI y XVII, según los investigadores.