Uno de los principales problemas que está teniendo el Gobierno es la inflación, un fenómeno que Sergio Massa no pudo controlar. El ministro de Economía prometió que el IPC bajaría en relación a los meses anteriores pero no está sucediendo. El 2023 comenzó con un aumento generalizado del 6% en enero, con los alimentos en lo más alto de las subas.
Para febrero, las proyecciones siguen siendo negativas para Massa. Desde Focus Market analizaron el mercado y sostienen que el aumento en el precio de la carne hace que la comida sea nuevamente la líder del ranking de aumentos. El relevamiento de la consultora estima un 7,2% de incremento en el segmento alimenticio y esto llevaría a la inflación general al 6,1%.
Damián Di Pace, el titular del organismo, explicó que «el aumento promedio del rubro carne vacuna hizo saltar la categoría alimentos por su nivel de incidencia en la canasta de alimentos de los argentinos a pesar de aún estar por debajo de la inflación interanual». Los números de los cortes vacunos habrían registrado incrementos de arriba del 20% durante febrero.
«Los precios justos forman parte de una porción de las ventas minoristas en consumo masivo, pero no resuelven el problema de la caída de la demanda de dinero del peso argentino y pérdida de poder adquisitivo que se manifiesta con variación de precios en categorías básicas en el mes de febrero», indicó Di Pace sobre este fenómeno, según NA.
Inflación sin control: lo que más aumentó
Durante el mes de febrero, los productos que más aumentaron en relación a enero son: Desinfectantes 37,3%, Cremas dentales 28,2%, Huevos 23,3%, Carnes 22%, Enlatados de Pescados 12,9%, Flanes 12,3%, Jabón en Barra 11,4%, Mermelada 11,3%, Yogures 10,5%, Nuggets 10,3 y Pastas Secas 9,4%. En cuanto a las categorías, en Alimentos y Bebidas la variación fue de 7,2 % y en Higiene y Limpieza del 8% entre lo más destacado.
