Los batacazos del oficialismo no cesan en este año electoral que se perfila oscuro para los dirigentes kirchneristas. Jonatan Viale, al enumerar los fracasos de la gestión en distintos niveles, destacó cómo «cruje el populismo» luego de exprimir por unos cuantos años el Estado y sus fondos públicos. Sin más que le quede, ahora solo queda la caída del kirchnerismo.
El primer batacazo que nombró en su columna editorial de Radio Rivadavia fue el de Neuquén, en donde el Movimiento Popular Neuquino (MPN), aliado al oficialismo, perdió la provincia luego de 63 años de ser Gobierno. «Es señal inequívoca de cambio de era. Después vemos lo de Figueroa. Pero se cayó porque la gente se hartó del populismo, de 60 años de la misma porquería», indicó.
Asimismo, a pesar de la abrupta suba de inflación de marzo (7,7%), el ministro de Economía Sergio Massa no hizo más que compartir escenario con el presidente de la AFA para anunciar la realización del Mundial de Fútbol Sub20 en Argentina. «Por estas cosas, la sociedad le ha picado el boleto al Gobierno», indicó Jonatan Viale.
Pero hay más. Hay algunos dirigentes y aliados que, directamente, prefieren decir que el Gobierno actual no es kirchnerista, como el diputado Leopoldo Moreau o el actor Darío Grandinetti. Sin embargo, la mayoría de las cajas del Estado están manejadas por La Cámpora, entre ellas, PAMI, Anses y la empresa de bandera Aerolíneas Argentinas.
Mientras tanto, la ministra de Trabajo Kelly Olmos afirma que el poder adquisitivo no se ha perdido, a pesar de que la gran mayoría de los trabajadores informales sufrieron pérdidas por inflación. A pesar de los factores internos que agravan la economía, el Gobierno sigue empecinado a echar culpas a Macri, la pandemia o la guerra.