Los médicos en Reino Unido comenzaron este martes una huelga de cuatro días por salarios que probablemente cause una interrupción sin precedentes en el Servicio Nacional de Salud (NHS) financiado por el estado, lo que llevó al gobierno a advertir sobre un riesgo para la seguridad del paciente.
Decenas de miles de médicos jóvenes, médicos calificados que constituyen casi la mitad de la fuerza laboral médica, están en huelga por aumentos salariales más acordes con la inflación, en una huelga que sigue a una huelga de médicos de tres días el mes pasado.
«Esta última ronda de huelgas verá niveles de interrupción sin precedentes, y estamos muy preocupados por la gravedad potencial del impacto en los pacientes y los servicios en todo el país», expresó el director médico nacional del NHS de Inglaterra, Stephen Powis.
«También les hemos pedido (a los hospitales) que reprogramen los procedimientos y los pacientes ambulatorios lo más rápido posible, pero tomará semanas recuperarse», dijo Powis, y agregó que el NHS estaba trabajando para garantizar que los servicios de emergencia se mantuvieran intactos, informó Reuters.
La huelga es la más reciente que involucra al personal del NHS, luego de huelgas de enfermeras, paramédicos y otros que exigen aumentos que reflejen mejor la inflación anual que supera el 10%. Se produce cuando el organismo experimenta una de sus crisis más graves en sus 75 años de historia, abrumado con unos 7 millones de pacientes que esperan tratamiento hospitalario, lo que afecta gravemente a áreas como la atención cardiovascular.
El primer ministro Rishi Sunak ha hecho de la reducción de los tiempos de espera en los hospitales una de sus principales prioridades en medio de la erosión de la satisfacción pública con una institución que ha sido durante mucho tiempo una fuente de orgullo nacional.
