Este martes, el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU) votó abrumadoramente a favor de extender el mandato de un organismo de investigación que investigue posibles crímenes de guerra cometidos desde la invasión de Rusia a Ucrania.
Veintiocho países votaron a favor de extender el mandato de la Comisión Internacional Independiente de Investigación sobre Ucrania por un año. Diecisiete se abstuvieron y dos votaron en contra del organismo, que Ucrania dice que es esencial para que Rusia rinda cuentas por sus crímenes.
«El alcance y la brutalidad de las atrocidades de Rusia en Ucrania están simplemente más allá de cualquier comprensión humana», dijo al Consejo la embajadora de Ucrania ante las Naciones Unidas en Ginebra, Yevheniia Filipenko, antes de la votación.
«Creemos firmemente que el trabajo continuo de la Comisión para seguir investigando, documentando y denunciando las violaciones de los derechos humanos y los crímenes internacionales cometidos contra el pueblo de Ucrania podría salvar más vidas inocentes, (y) podría contribuir a la rendición de cuentas de los perpetradores y la justicia para las víctimas», agregó, según replicó Reuters.
En un informe publicado el mes pasado, la comisión encontró que algunos delitos cometidos por las fuerzas rusas en Ucrania. También, incluido el uso de la tortura y los ataques contra la infraestructura energética del país, podrían constituir crímenes contra la humanidad.
Rusia, que se negó a dirigirse al Consejo de Derechos Humanos, niega enérgicamente haber cometido atrocidades o haber atacado a civiles en Ucrania. China, un aliado de Rusia, votó en contra de la iniciativa, que fue respaldada por más de 50 estados. Sudáfrica se abstuvo y dijo que la iniciativa podría abrir una «cucha más profunda» entre los lados.