Un jubilado se olvidó la tarjeta de débito en el cajero automático y realizó la denuncia en la Comisaría de Gan Gan, Chubut. Sin embargo, al día siguiente, la policía encontró el plástico y le avisó al damnificado, quien luego descubrió, al cabo de unos días, que le habían sustraído un total de 380.000 pesos a través de varios movimientos de compras.
El hombre contó a Radio 3 que al día siguiente de la denuncia, el comisario recuperó la tarjeta y le mandó la foto para que se quedara tranquilo, pero al cabo de unas horas del hallazgo comenzó a ver transacciones entre $30.000 y $60.000. En el banco le dijeron al adulto mayor que impostores habían utilizado su tarjeta para pagar cuentas en comercios de Puerto Madryn y en Trelew con el débito automático.
Por ahora, la causa quedó a cargo de la Justicia de Puerto Madryn. El jubilado contó que el hermano fue a retirar la tarjeta de débito a la Comisaría 5 días después del extravío y en ese lapso se provocó los movimientos ilegítimos de dinero. «La Justicia de Madryn se portó muy bien, pero hasta ahora nadie me devolvió la plata. Sinceramente no se si el jefe de la Policía (César Brandt) o el ministro de Seguridad (Miguel Castro) están enterados de esto, pero la policía de Gan Gan está involucrada en este robo», expresó el denunciante.
«Los únicos responsables son los policías de Gan Gan (localidad rural de Chubut) y hay vídeos que los responsabilizan», aseguró la víctima. Lo cierto es que ante casos de robo o extravío de tarjetas es fundamental llamar primero al número de teléfono de Visa o Mastercard, según corresponda, y marcar la opción de robos o extravíos para que el operador pueda bloquear el plástico y notificar al banco. La denuncia en la policía es un segundo trámite optativo que no es obligatorio.
En Santa Fe también sucedió un hecho similar de otro efectivo de la fuerza de seguridad provincial que fue condenado a 2 años de prisión y una multa de 15.000 pesos por haber robado la tarjeta de débito a un jubilado. En este otro caso, el policía sacó 8.000 pesos y quiso realizar un préstamo de 42.000 pesos que fue rápidamente revocado tras la denuncia del damnificado.