Sudán: el ejército expulsa del Gobierno al líder de las RSF MUNDO El Intransigente

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Sudán: el ejército expulsa del Gobierno al líder de las RSF

El conflicto ha forzado el desplazamiento de 843.000 personas dentro de Sudán y ha obligado a unas 250.000 a huir a países vecinos.

La capital de Sudán, Jartum, y su ciudad hermana, Bahri, fueron objeto de nuevos ataques aéreos este viernes, en la quinta semana de un conflicto entre el ejército regular del país y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) que está agravando la crisis humanitaria en el país de África.

El jefe del ejército sudanés, el general Abdel Fattah al-Burhan, tomó la medida largamente esperada de destituir al jefe de las RSF, Mohamed Hamdan Dagalo, más conocido como Hemedti, de su puesto como su adjunto en el gobernante Consejo Soberano.

Ambos habían dirigido el Consejo desde 2019, cuando derrocaron al expresidente Omar al Bashir en un contexto de protestas multitudinarias contra su Gobierno, antes de dar un golpe de Estado en 2021, cuando se acercaba la fecha límite para entregar el poder a la población civil para una transición hacia elecciones libres.

Los enfrentamientos estallaron el 15 de abril, tras las disputas sobre los planes de integración de las RSF en el ejército regular y sobre la futura cadena de mando, en el marco de un acuerdo para caminar a Sudán hacia la democracia tras décadas de autocracia plagada de conflictos. Burhan nombró en sustitución de Hemedti a Malik Agar, líder de un grupo armado que hizo un acuerdo de paz con el Gobierno en 2020, informó Reuters.

Los ataques aéreos de este viernes tuvieron como objetivo distritos del este de Jartum, con testigos informando de que habían oído armas antiaéreas utilizadas por las RSF. Bahri y Sharg el-Nil, al otro lado del río Nilo desde Jartum, fueron objeto de ataques aéreos durante la noche y la mañana del viernes.

Las conversaciones de alto el fuego, mantenidas con mediación de Arabia Saudita y Estados Unidos, han proseguido sin avances en la ciudad saudita de Yeda. El conflicto figura también entre los principales puntos del orden del día de una reunión de la Liga Árabe celebrada en la misma ciudad el viernes.

«Nadie nos protege. No hay policía. Ni el Estado. Los delincuentes atacan nuestras casas y se llevan todo lo que tenemos», declaró Sarah Abdelazim, empleada del Estado de 35 años en Jartum. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 705 personas han muerto por causa de los enfrentamientos y al menos 5.287 han resultado heridas.

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