Las campañas electorales son un terreno duro para la política en Argentina porque muchas veces las críticas son elevadas. En este marco, el que recibió golpes por demás fue Javier Milei que de parte de Julia Mengolini, periodista cercana al kirchnerismo, fue puesto en el ojo de la tormenta acerca de su sexualidad y una supuesta relación con su hermana, sobre lo cual Viviana Canosa decidió intervenir.
La periodista afirmó que «son muy tóxicos» en el Gobierno y desarrolló su postura acerca de este tema. «Empieza la campaña y empezamos a ver que se van a tirar con absolutamente todo. Dicen que en campaña vale todo. Se van a empezar a meter con los perros y gatos de los candidatos, sexualidad y masturbación también», inició.
«Mengolini salió con el ‘ah pero Milei’. Me llamó la atención que criticó a Milei porque tiene 8 perros, nunca me pareció algo malo tener perros. Dice que Milei está enamorado de su hermana, golpe más bajo no existe. Son muy tóxicos. Cualquier cosa vale en campaña. A Mengolini le parece sospechoso que Milei hable bien de su hermana, nunca lo escuché decir que está enamorado. Tenés que tener la cabeza reventada para dar a entender que se acuesta con su hermana. Qué tóxicos por dios», criticó Viviana Canosa.
En este marco, la periodista sostuvo que «no tienen un límite moral y defienden delincuentes que se robaron la argentina. A la vez me pregunto, ¿Cuál es el problema de que vivas con 8 o 4 perros? En mi fondo de pantalla tengo a mi perra Tila. ¿Cómo pueden hablar tan mal de una persona que tiene perros? Desde cuando?. Con la cantidad de gente que conocen ustedes que tienen gatos de dos patas»; arremetió la comunicadora por LN+.
¿Y del Gobierno?
A raíz de estas críticas de la periodista K, Viviana Canosa le preguntó por qué «no sospecha nada de una mina que nunca laburó pero que tiene 5 palos verdes en una caja de seguridad o de los choferes y cajeritos de banco que ahora son dueños de la Argentina. Son muy tóxicos. Es un golpe bajo pero le pegan porque Milei está subiendo en las encuestas», cerró.
