La inflación es uno de los fenómenos más difíciles que el Gobierno no pudo controlar en sus cuatro años de gestión. De hecho, en los últimos meses del ciclo de Sergio Massa al frente del Ministerio de Economía la situación económica empeoró considerablemente. Tal es así que los precios se dispararon y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) hay un fiel reflejo de ellos.
La suba de precios en dicho distrito para abril fue del 7,8% con un grave condicionante: los alimentos aumentaron un 10,4%. Estas cifras de la Dirección de Estadística porteña son alarmantes porque todos estos valores podrían ser más altos cuando se traslada al plano nacional. Así, el primer cuatrimestre del 2023 cerró con un alza del 31,2% en los precios generales.
En la medición interanual, la inflación trepó al 110,4% y marca un acelerado aumento en los precios por la variación en el dólar y los costos de producción. El rubro más afectado fue el de los alimentos que subió hasta el 37,5% en la medición cuatrimestral y, en comparación con abril del año pasado, se estacionó en una suba del 119,5%.
Este sector es el segundo que más aumentó en el año porque «restaurants y hoteles» alcanzó el 130,9% y parece no tener techo. Otro de los ámbitos que golpea de lleno a los porteños es el de indumentaria, con una escalada del 9,4% para este mes y 117,7% en la variación interanual, un crecimiento elevado a pesar de la implementación de Precios Justos por parte de Sergio Massa.
Otros rubros
Más abajo en la lista, los costos de alquiler y servicios públicos crecieron un 6,4% en CABA y acumulan un 30,2% durante 2023 y 118,6% en el año. En cuanto al transporte, los costos subieron un 8,1% y se ubican en un 89,7% de suba en los últimos doce meses y por último en salud el ajuste fue del 4% en el mes, 25,6% cuatrimestral y 99,6% interanual.
