No se guardó absolutamente nada y salió con los tapones de punta. Y es que en los últimos días, mucho se ha hablado de Antonio, el hijo menor de Luis Ventura, fruto de su relación con Fabiana Liuzzi. El pequeño estuvo internado hace pocos días debido a una neumonía y un cuadro de dengue, y algunos comentarios enfurecieron a su madre.
Ahora, la rubia se volcó en sus redes sociales, más precisamente en su cuenta de Instagram. «¡Mi vida con un ángel! Mi principito, porque así es como lo siento. Antonio nació hace nueve años y desde entonces no para de enseñarme todos los días. Y para los que no tienen la bendición de disfrutarlo o conocerlo, quiero contarles que es un niño dulce, cariñoso, tranquilo», comenzó asegurando.
«De una belleza y piel incomparables. Le está costando hablar porque en su lado izquierdo del cerebro tiene pequeñas cicatrices, pero no es imposible que lo haga. Antoñito está poniendo todo de su parte junto con buenos profesionales. Con respecto a su salud es muy buena, y a veces me da sustos como cualquier niño en épocas de tantos virus», sostuvo.
Inmediatamente, Fabiana Liuzzi decidió ir por más. «Y lo digo con el alma que a mi hijo lo DISFRUTO PLENAMENTE… claro, como cualquier madre quiero que hable lo antes posible, pero por ÉL, porque hablar es una herramienta importante la cual necesitamos, pero mi hijo es muy feliz y lleno de amor», aclaró sobre el hijo que tiene en común con Luis Ventura.
«Y QUIERO DESTACAR QUE HAY PATOLOGÍAS QUE ESAS SÍ son muy dañinas para la humanidad, pero no les ponen rótulos, como LA MANIPULACIÓN, LA OBSESIÓN, LA MENTIRA, EL HOSTIGAMIENTO DESMEDIDO, EL ODIO, LA ENVIDIA, LA AVARICIA, EL ORGULLO, LA SOBERBIA, y podría estar todo el día», disparó mostrándose más directa que nunca.
«MUCHA GENTE PERVERSA QUE SÓLO BUSCA DÓNDE DESPARRAMAR SU CAMIÓN DE BASURA… pero vivimos en una sociedad muy hipócrita donde muy pocos son autocríticos y carecen de calidad humana y tienen miedo de mirarse al espejo. No es mi caso, por suerte, duermo muy tranquila. Beso enorme de una madre que se cansó de escuchar y ver ridiculeces y maldades. Dios los bendiga y gracias por tanto cariño», sentenció.