El viernes a las 13 horas, la Justicia condenó a Sebastián Villa, quien hasta el día jueves pertenecía al plantel de Boca Juniors, a dos años y un mes de prisión condicional por el delito de “lesiones leves doblemente calificadas por el vínculo y por mediar violencia de género”. Ahora bien, acorde precisó Jonatan Viale, esta sería la primera vez que una sentencia genera acción inmediata, ya que el club lo apartó horas después de conocerse el veredicto. Sin embargo, no sucede lo mismo con la vicepresidenta Cristina Kirchner. Aunque haya sido declarada culpable en la causa Vialidad, sigue ejerciendo el cargo.
El patrón se repite dentro de la política. Tal como recapituló el periodista en su columna editorial de Radio Rivadavia, son varios los referentes peronistas que se postulan a candidaturas y que han sido condenados por la Justicia. Guillermo Moreno como precandidato a presidente, Luis D’Elía como precandidato a gobernador y Alberto Samid como postulante para la intendencia de La Matanza son ejemplos de impunidad.
“Los tres quieren compartir una boleta. Es un reflejo, una parábola de la Argentina condenada, de que los condenados están condenados al éxito. Terminan libres y candidatos. Hasta comiéndose un bife de chorizo violando la prisión domiciliaria”, sintetizó Jonatan Viale al recordar el escape de Samid para irse a un restaurante.
Otro de los “culpables” es el exministro de Salud Ginés González García, quien organizó el vacunatorio VIP. Pese a las pruebas en su contra, no está ni siquiera procesado y fue aplaudido por el presidente. «Pobre la gente que se murió esperando la vacuna. ¿Cómo se llama esto? Romper con el sistema de valores, dar vuelta la tabla», resumió.
Jonatan Viale: «El kirchnerismo coquetea con lo delincuencial»
Al volver con la condena a Villa, el columnista destacó que se trata de un hecho «contracultura», debido a que la política del kirchnerismo «coquetea con lo delicuencial». «Esta es la cultura que nos vienen bajando: está mal pero no está mal. No sé si es suficientemente grave, no se robó tanto… La banalización del mal», problematizó.
De esta manera, para el kirchnerismo «todo es relativo», y no hay delito condenable. «Podemos tener un vicepresidente ladrón y no pasa nada, un ministro de Salud con vacunatorio VIP y no pasa nada, un diputado nacional vacunado VIP y no pasa nada. Estos 20 años de hegemonía cultural kirchnerista han venido a terminar con las referencias morales», sintetizó Viale.