Rusia añadió un nuevo problema en su situación bélica que data de casi un año y medio. En el Kremlin fueron advertidos por el Grupo Wagner debido a un bombardeo que sufrió uno de sus campamentos. Esto puso en alerta a Moscú ya que el líder de los mercenarios se encamina hacia la capital del país que comanda Vladimir Putin. La cúpula de Gobierno llamó a arrestar al amenazador.
Desde marzo del 2022 que en el oeste de Europa se viven momentos de muchísima tensión. Cuando el líder supremo ruso decidió invadir Ucrania, la parte oriental del viejo continente se hundió en un conflicto que no parece tener solución. Sin embargo a Rusia se le sumó un grave problema y es que el Grupo Wagner se rebeló y pidió derrocar al ministro de Defensa de Putin.
Yevguéni Prigozhin, máximo referente de los mercenarios Wagner, denunció que las fuerzas armadas rusas bombardearon a un campamento suyo. Ante esta situación, decidió ir contra los jefes militares de Rusia. Hace pocas horas tomaron las instalaciones militares de la ciudad de Rostov y actualmente se encuentran en camino hacia Moscú «para hacer justicia».
Segú cuenta Reuters, ya se han dado enfrentamiento entre los mercenarios y los soldados rusos regulares. De todos modos nada se ha interpuesto, hasta el momento, al objetivo de Prigozhin. Sus subordinados se encuentran a mitad de camino entre Rostov y Moscú. Es por eso que en el Kremlin llamaron a reforzar la seguridad.
Vladimir Putin no se quedó al margen y salió por televisión acusando al Grupo Wagner de «traición». En esa misma línea subrayó que serán castigados cuando sean arrestados. Por su lado, Volodomir Zelenski se hizo eco de los hechos. El presidente ucraniano aseguró que «la debilidad de Rusia es obvia» aunque admitió que, mientras Rusia siga amedrentando a Ucrania, seguirá el «caos y el dolor».
