El Congreso de El Salvador aprobó una reforma electoral en la madrugada de este miércoles para reducir el tamaño del cuerpo legislativo en casi un tercio, una medida que, según el partido gobernante, reducirá el gasto y los críticos dicen que consolida el poder antes de las elecciones.
La reforma, anunciada la semana pasada por el presidente Nayib Bukele en un discurso que marca cuatro años en el gobierno, reduce el tamaño del Congreso unicameral de 84 legisladores a 60. Bukele también propuso una reforma para consolidar los 262 municipios del país en 44 distritos.
Los partidos de oposición dicen que reducirán al mínimo la participación política de los partidos más pequeños. «Esta decisión tiene un interés electoral, que es precisamente seguir concentrando poder, concentrando recursos», manifestó la diputada Anabel Belloso, del partido de izquierda FMLN.
Las elecciones presidenciales y legislativas se llevarán a cabo en febrero, y las elecciones municipales y regionales al Parlamento Centroamericano están programadas para marzo. Bukele es muy favorecido para la reelección, a pesar de que la constitución parece prohibir claramente los mandatos consecutivos, informó Reuters.
En 2021, el máximo tribunal de El Salvador, cuyos miembros son designados por el Congreso, controlado por el partido del presidente, dictaminó que Bukele podía presentarse a la reelección, decisión que provocó la condena internacional. Las propuestas de reforma son parte de una «guerra contra la corrupción» más amplia anunciada por el presidente.
La semana pasada, el presidente expresó que también construiría una prisión para delincuentes de cuello blanco. Similar a la «mega prisión» abierta a principios de este año para pandilleros. Lanzó una dura campaña contra las pandillas el año pasado, suspendiendo algunos derechos constitucionales como parte de un estado de excepción. Ese movimiento obtuvo un amplio apoyo entre los salvadoreños.