Sergio Berni y la Policía bonaerense fueron denunciados por organismos de Derechos Humanos. Lo que demandan las organizaciones es que se siguen ejecutando espionajes ilegales. Explicaron que la inteligencia la realizan en asambleas y reuniones de organizaciones sociales, sindicales y de derechos humanos.
La Comisión Provincial por la Memoria (CPM) y la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) enviaron demandas al ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, al Congreso nacional y a la legislatura provincial. “La Policía Bonaerense realiza acciones de espionaje e inteligencia ilegal sobre asambleas, encuentros o movilizaciones de organizaciones sociales, sindicales y de derechos humanos”, explicaron.
“La vigilancia y el seguimiento por parte de efectivos de civil o uniformados de la Policía de la Provincia de Buenos Aires sobre organizaciones sociales, sindicales, políticas, de derechos humanos y de familiares de violencia estatal o institucional se producen de manera permanente y recurrente”, insistieron desde los organismos que defienden los DDHH.
En el descargo expusieron la preocupación que ocasiona que se lleven prácticas de índole ilegal: “Significan una verdadera violación de la normativa vigente, a obligaciones internacionales del Estado argentino y a los más fundamentales derechos y garantías que debe garantizar el estado democrático”, subrayaron los denunciantes.
En la denuncia, llegaron a afirmar que los mismo agentes enviados a hacer los espionajes, reconocieron que estaban ejecutando una suerte de parainteligencia: “En algunos casos, las mismas autoridades policiales reconocieron expresamente el accionar, manifestando que así lo hacen en cumplimiento de órdenes emanadas de su superioridad”, concluyeron.