El Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM) subirá 19,9% a partir de julio. Así, pasará de $ 87.987 a $ 105.500, según acordaron este jueves empresarios y sindicalistas en una reunión convocada por el Ministerio de Trabajo de la Nación. Además, desde agosto se elevará a $ 112.500 y en septiembre alcanzará los $ 118.000. En tres meses, el alza será de 34,1%, entendimiento que no contó con el apoyo de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) y de una rama del sindicalismo estatal.
El Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil aprobó por mayoría el aumento de 34,1% en tres tramos (julio a septiembre). La suba recibió desaprobación por parte de la CTA Autónoma, encabezada por Hugo ‘Cachorro’ Godoy, en tanto que la CTA de Hugo Yasky se abstuvo en la votación. El incremento del ingreso mínimo se aprobó sobre la base de los valores vigentes a junio último, de $ 87.987.
La reunión se dio en medio de una protesta piquetera frente al Ministerio de Trabajo, en la Avenida Leandro N. Alem, en el Bajo porteño. “Marchamos por un aumento del salario mínimo de emergencia a $ 200.000”, dijeron desde Unidad Piquetera antes del encuentro de la CTA Autónoma, CTA y CGT. “Si el problema es el déficit, que aumenten los salarios y que le cobren impuestos a las grandes empresas exportadoras, financieras, que son las que están aumentando sus ingresos de manera extraordinaria”, dijo Godoy.
La modificaciones del salario mínimo en 2023
En la primera mitad del año el salario mínimo tuvo un incremento del 42% frente a una inflación que, tras la publicación del IPC de junio, llegó al 50,7%. Es una pérdida del 6% con respecto a la inflación del primer semestre. Si se lo compara con la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que el Indec utiliza para elaborar el índice de pobreza, la caída rondaría el 9%.
Qué características debe reunir el salario mínimo
Según la Ley de Contrato de Trabajo, el SMVM tiene tres características. Una es que es la menor remuneración que debe percibir en efectivo el trabajador sin cargas de familia por su jornada laboral. Otra, que debe asegurarle alimentación adecuada, vivienda digna, educación, vestuario, asistencia sanitaria, transporte, esparcimiento, vacaciones y cobertura previsional. Y por último, debe ajustarse periódicamente de acuerdo con las variaciones del costo de vida.