Alejandro Fantino habló de su pasado laboral con Pamela David ESPECTÁCULO El Intransigente

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Alejandro Fantino habló de su pasado laboral con Pamela David

El conducto esgrimió su respuesta tras el descargo de su colega en «LAM».

Alejandro Fantino, conductor.

Pamela David salió a aclarar sus dichos sobre Alejandro Fantino para evitar la polémica. Resulta que la actual presentadora de «Desayuno americano» expuso que más de una vez se fue enojada de «Animales sueltos» porque el presentador no la dejaba expresarse cuando lo deseaba. En ese marco, el equipo de «LAM» buscó al expresentador de América TV para ver si tenía algo para decir al respecto.

«Nos mensajeamos con Pame y en ningún momento me tomaría nada malo porque tengo una relación desde hace mucho tiempo», dijo Alejandro Fantino recalcando la buena onda con su colega. Acto seguido, el conductor manifestó: «Además, Pame conduce, y uno sabe como conductor que a veces cuando estás laburando y tenés cinco o seis personas a tu alrededor y tenés tres invitados».

«Ves que un invitado habló poco, entonces te sentís mal y querés hacerlo hablar», aseguró sobre el rol del que está al frente de un ciclo con panelistas e invitados. A modo de cierre, Fantino explicó: «El manejo de la cámara es distinto, entonces a veces es natural que se te escape decir ‘che para’. Pero no lo tomé a mal».

El descargo de Pamela

Aunque David reconoció que varias veces se molestó con la dinámica del ciclo de Fantino, rescató lo que aprendió durante esos años trabajando con el popular animador: «En lo personal me dio una oportunidad muy grande. Empecé en el 2009 con Fantino, era un programa que se levantaba del aire por América».

«No quiero meter la pata, pero estaba Anita Martínez, Éber Ludueña, y hacen un cambio porque se levantaba del aire y salen Ébere y Anita, entro y la verdad que quedó, perduró»Terminamos tarde y nos íbamos. El programa de se desarmaba y nos íbamos cada uno a su casa», añadió.

Y finalizó: «Con respecto a si le decían algo al debatir sobre cierto tema, aclaró: «No, no, no había reuniones. A mí me gustaba jugármela. De hecho, me servía a mí mostrarme porque después me salían curretes, montañas, viajes, el interior, pero trabajaba de eso, de bomba, de sexy».

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