Dentro de Unión por la Patria habrá elecciones internas entre Juan Grabois y Sergio Massa. Sin embargo, el ministro de Economía aparece como el candidato de la unidad del espacio porque, supuestamente, fue consensuado entre los tres partidos que forman parte de la coalición. En este marco, Axel Kicillof comenzó su campaña por la provincia de Buenos Aires y tuvo que inclinar su balanza.
Cabe remarcar que el mandatario provincial evaluó desdoblar las elecciones porque consideró que compartir lista con otro dirigente lo podía perjudicar. Ahora se mostró junto a Grabois, quien cuenta con un voto más duro del ala K sin tanto lugar para el peronismo. Esto generó dudas dentro del oficialismo porque creen que podría ser un mensaje que incentive a las internas.
«Cuando observa que hay respuesta, decisión política y acompañamiento del Gobierno, nuestra sociedad no se resigna y pide seguir ampliando derechos: para eso estamos, vamos a seguir trabajando para hacer todo lo que falta», afirmó Axel Kicillof durante un acto en una cooperativa textil del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) en Berisso, según NA.
Si bien el gobernador bonaerense se pronunció a favor de Sergio Massa en un principio, ahora cambió de postura. Lo que pasó es que el funcionario no quiere dejar ningún espacio a la deriva que pueda ser utilizado por la oposición para captar votos en un distrito tan determinante como lo es la provincia de Buenos Aires, donde es el gran favorito.
Críticas a la oposición
Además, el mandatario provincial apuntó contra Juntos por el Cambio y se diferenció en cuanto a las propuestas: «Durante la gestión anterior, en la que se perdían miles de puestos de trabajo y se fundían las empresas, este lugar era un baldío; hoy, con el peronismo y la organización de los trabajadores, es una cooperativa que está funcionando y produciendo», manifestó.
«La derecha dice abiertamente qué es lo que quiere hacer. No hacen promesas, amenazan con quitar los derechos que se han conquistado con la lucha de generaciones y generaciones. Tenemos otra ventaja muy importante: no hace falta recurrir a los libros de historia, todos sabemos el daño que han hecho hace muy poco cuando apuntaron contra los derechos laborales y previsionales mientras las bajaban los impuestos a los más ricos», cerró.