A pesar de la promesa de Alberto Fernández de no devaluar, lo menos que hizo durante su gestión es cumplir con esa premisa. Acorde precisó Jonatan Viale, su Gobierno devaluó un 660%, y se espera que el porcentaje aumente hasta diciembre. Citando a Luis D’Elía, el Gobierno nacional y el país se encuentra «camino al desastre» ante el futuro negativo que se avecina.
«Estamos ante el Gobierno más devaluador de la historia», sentenció en su columna editorial de Radio Rivadavia. En este sentido, no sólo alertó sobre la suba del dólar blue, sino también del oficial, que generaría un fuerte impacto en los precios e inflación. Todos estos datos son brindados desde el Fondo Monetario Internacional, que incluye un pedido de restricción cambiaria.
«Lo que está diciendo el Fondo es que Argentina tiene que tener un solo tipo de cambio como cualquier país del mundo, o sea, devaluar. Incluso, agrega un valor: el precio del dólar oficial en la Argentina, de equilibrio para que su sector externo funcione, debería ser $333. Ahora bien, eso es un montón, es una devaluación del 20% en un saque», especificó Jonatan Viale.
Ante la gravedad del asunto, el país está al borde de una hiperinflación si el oficial se despega desde donde está. «Lo que se está discutiendo es muy sensible, es consecuencia de un Gobierno que hizo populismo con el dólar. Esto es lo que hizo Massa, Alberto, Cristina. El problema es que a esto lo vamos a pagar nosotros, que cobramos en pesos», aseveró el politólogo.
Jonatan Viale fulmina a Sergio Massa
Mientras las reservas se encuentran en rojo y Argentina tiene el número más alto de deuda pública de su historia, Jonatan Viale se preguntó cómo el ministro de Economía Sergio Massa puede ser candidato. «¿Cómo se puede ser candidato a presidente y destrozar la economía?», interrogó. En tanto, el ministro se sigue paseando por ciudades para hacer campaña.
Con devaluación, inflación y pobreza, Mayra Mendoza, quien antes calificaba a Massa como «traidor a la patria» sigue impulsando su campaña como si fuese un héroe rescatista. Sin embargo, hoy en día lo único que importa «es el carguito» a costa de cambiar las bases ideológicas.