En un nuevo aniversario del 9 de julio por el Día de la Independencia, la Dirección General de Aduanas anunció que recuperó un documento original de la declaración firmada en 1816. Se trata de una de las 1.500 copias que mandó a imprimir Juan Martín de Pueyrredón para anunciar la liberación de la Argentina del dominio de la corona española, informó este domingo el organismo.
“Recuperamos una pieza fundamental de nuestro patrimonio que tiene un gran valor histórico y simbólico”, señaló el titular de la Aduana, Guillermo Michel. El acta es de relevancia dado que la declaración manuscrita, firmada por los representantes de la Provincias Unidas del Río de la Plata, desapareció y en la actualidad, son las copias las consideradas originales ya que llevan un pie de imprenta que lo certifica.
En los últimos 200 años, pocos documentos prevalecen de aquel hito. El organismo detalló que halló el escrito tras de un operativo que inició con el intercambio de información internacional en el que el Ministerio de Cultura de Perú alertó sobre el robo de un libro manuscrito del año 1772. A fin de resguardar el patrimonio cultural, la Aduana recuperó una de las 1.500 copias de la declaración que, el 13 de agosto de 1816, el director supremo Pueyrredón mandó a imprimir para informar la independencia.
En 1916, con motivos de los festejos del Centenario de la Independencia, el entonces presidente Victorino de la Plaza ordenó la búsqueda del manuscrito original. Lo mismo hizo 50 años más tarde el entonces mandatario Arturo Illia, sin éxito. Actualmente aún se desconoce su paradero de los escritos.
La investigación que dio con el documento sobre la Independencia
En la investigación, la Aduana detectó que el documento estaba a la venta en una librería virtual especializada en la comercialización de libros raros y antiguos, con sede en Buenos Aires. Con la intervención de la Justicia en lo Penal Económico, y tras ocho allanamientos en domicilios del AMBA, se encontraron libros, pinturas y hasta relojes de oro, sin la documentación respiratoria.
Entre las posesiones patrimoniales estaba también el impreso de la Declaración de la Independencia Argentina, firmada un mes después de la original, y en la que se refleja la enmienda realizada el 19 de julio de 1816, por pedido de Pedro Medrano en una sesión secreta, en la que solicitó agregar que no sólo se declaraba la independencia del Rey Fernando VII, sus sucesores y metrópolis, sino también de cualquier otra dominación extranjera.