Misiles rusos alcanzaron terminales de grano de una empresa agrícola en la región de Odesa, en la cuarta noche consecutiva de ataques aéreos contra el sur de Ucrania. Pero los ataques de Rusia de este viernes fueron menos intensos que en las tres noches anteriores.
A principios de esta semana, misiles y drones alcanzaron ciudades y puertos del sur después de que Moscú renunciara a un acuerdo mediado por la ONU que permitía el envío seguro de grano ucraniano a través del mar Negro. El gobernador regional de Odesa, Oleh Kiper, confirmó que dos personas habían resultado heridas en el ataque contra una empresa agrícola. Pero no dijo en qué parte de la región se encontró la empresa.
«Desgraciadamente, las terminales de grano de una empresa agrícola de la región de Odesa han sido atacadas. El enemigo destruyó 100 toneladas de guisantes y 20 toneladas de cebada», expresó. Además, agregó que Rusia había atacado con misiles de crucero Kalibr que fueron disparados desde el mar Negro a baja altura para eludir los sistemas de defensa antiaérea.
También confirmó que dos misiles alcanzaron las instalaciones de almacenamiento de grano, provocando un incendio. Otro misil impactó en la misma empresa mientras se extinguían las llamas, dañando equipos agrícolas y de rescate, según informó la agencia Reuters.
Moscú afirma que ha estado llevando un cabo «ataques de represalia» esta semana tras abandonar el acuerdo de exportación de grano del mar Negro. También acusó a Ucrania de estar detrás de las explosiones del lunes en un puente que se utiliza para transportar suministros militares rusos.
Rusia inició su invasión en febrero de 2022. Aún mantiene en su poder franjas del territorio ucraniano, también ha seguido bombardeando esta semana zonas del este y el sur. Yuriy Malashko, gobernador de Zaporiyia, informó de 80 rusos ataques contra asentamientos de la región en las últimas 24 horas, y dijo que cuatro personas habían muerto.