El denominado ‘Vacunatorio VIP’ quedará grabado como uno de los mayores escándalos del gobierno de Alberto Fernández. En el marco de esta causa, se conoció en las últimas horas que la Justicia sobreseyó a la vicepresidenta Cristina Kirchner por una denuncia sobre su vacunación contra el coronavirus (Covid-19). A la titular del Senado la habían denunciado por supuestas irregularidades en ese proceso.
El autor de esa presentación contra Cristina Kirchner fue el dirigente de Juntos por el Cambio Yamil Santoro. Éste había manifestado “sospechas, a partir de información periodística” sobre la forma en que se vacunó la vicepresidenta en la primera etapa del Plan Estratégico de Vacunación en Hospital Juan Domingo Perón, en la ciudad bonaerense de Avellaneda. En esa ocasión, el entonces viceministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak, fue quien le administró la dosis.
Qué decía la denuncia contra Cristina Kirchner
Según la denuncia, Cristina Kirchner “podría haber formado parte de un ardid en perjuicio de la Administración y del patrimonio del Estado Nacional, en complicidad con funcionarios nacionales, provinciales y municipales, tendiente a obtener un beneficio sanitario (la vacuna) que no le correspondía”. “Dicho ardid podría haber consistido en simular la calidad de legítima destinataria de la vacuna de acuerdo con la política sanitaria y los criterios sanitarios vigentes”, añadía la denuncia.
Qué definió la Justicia
Pero el juez federal de La Plata Alejo Ramos Padilla sostuvo que la vicepresidenta era considerada parte del “Personal estratégico” en el marco de la pandemia e integraba los grupos poblacionales que tenían prioridad en el esquema vacunatorio. “Resulta evidente que la vacunación de la vicepresidenta de la Nación no podría considerarse una violación a la norma regulatoria”, contrapuso el magistrado en su resolución.
“Fue la propia vicepresidenta y el entonces viceministro de Salud de la Provincia, Nicolás Kreplak, quienes publicaron en sus respectivas cuentas de Twitter imágenes y videos de la vacunación”, recordó Ramos Padilla. “Resultaría absurdo sostener que una persona públicamente conocida y que además exhibe en sus redes sociales el momento de su vacunación llevó a cabo un ardid o engaño o simuló una calidad o categoría particular para obtener acceso a dicha vacuna”, completó el juez.
La causa iniciada por Santoro, dirigente de Republicanos Unidos, se presentó como una derivación del expediente conocido como ‘Vacunatorio VIP’ y llegó hasta la Justicia federal de La Plata después de que la jueza María Eugenia Capuchetti resolviera “extraer testimonios” (iniciar una investigación ante otro tribunal) en el expediente que tramita en su juzgado, consignó NA.