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ESPECTÁCULO

«Dijo que le dolía el pecho y se murió»: la tristeza de Carmen Barbieri al hablar de la muerte de Mariano Caprarola

La conductora no pudo ocultar sus emociones al hablar frente a los televidentes.

Carmen Barbieri
Carmen Barbieri

El mundo del espectáculo se vio conmocionado debido a la muerte de Mariano Caprarola, el reconocido crítico de moda que se había ganado el cariño de todos. Fue Carmen Barbieri quien en su programa de Ciudad Magazine, «Mañanísima», demostró todo su dolor ante la noticia que nadie esperaba conocer.

«Todas las mañanas abrimos el programa bien arriba. Es lo que yo quiero que sientan, esa energía que levanta los corazones. Pero a veces en la vida no podemos manejar lo que quisiéramos, que vivan los amigos, los hijos y los padres eternamente», comenzó asegurando la madre de Fede Bal delante de los televidentes.

Inmediatamente decidió ir por más. «Se nos fue físicamente un gran amigo, un gran artista, un gran compañero. Acá están todos llorando. Marian, te amo. Yo sé que él se fue físicamente, pero en mi corazón sigue estando. Se fue de golpe. Lotocki le había hecho todo el cuerpo, hace como 10 años. Lo que le puso había migrado en su cuerpo. De vez en cuando se iba sacando esa cosa que pone Lotocki que hace tan mal», lanzó.

Movilizado

«Él era un gran tipo… Pero en cada mensaje que me mandó de voz se iba despidiendo, o tendría miedo que le pasara lo que le está pasando a Silvina Luna. Salió de la operación. Le iban a sacar o le sacaron unos cálculos o piedritas. Estaba en una sala de recuperación, ya le habían dado el alta. Estaba con la médica y le dijo que le dolía el pecho y se murió», comentó Carmen Barbieri sobre lo sucedido.

«Yo le mando un mensaje enorme a su mamá, a la cual él amaba, se amaban. Una relación maravillosa. Me hace acordar a la relación que tengo con mi hijo. Una mujer maravillosa que ya había perdido a un hijo, ahora pierde el otro. Estamos con vos. Era tan divertido. Era cabrón también, pero tan divertido. Yo sé que estás en un buen lugar, que seguramente estás sentado al lado de Dios porque ya se lo había ganado el asientito al lado de Dios», dijo.

«Estarás en paz. Tenía mucho miedo a lo que iba a venir después de años y años de operación con Lotocki. Nunca habló mal de él porque lo quería mucho y era su amigo. No podía entender cómo su amigo le pusiera un veneno en su cuerpo, como decía él», sentenció.