Eugenio Semino, defensor de la tercera de edad, afirmó que la utilización del bono es un pago discrecional que no se tiene en cuenta para la movilidad ni el aguinaldo y, sin embargo, el equipo económico de Sergio Massa lo ha utilizado como política de Estado. Por otro lado, Semino dijo que los jubilados durante la gestión de Massa han perdido un 26% del poder adquisitivo.
«La situación de los jubilados es seria y vienen perdiendo por goleada a través del tiempo. Se ha precipitado esa caída en el último año, porque el ajuste se hace sobre esos sectores que son los jubilados y personas con discapacidad. Si bien es una de las cajas más importantes que hay en el presupuesto estatal, son los que van perdiendo y, sobre todo, en los procesos de alta inflación es mucho más notorio», relató Semino en una entrevista para la radio Rivadavia.
«Para tener simplemente un número que descriptivo de un año de la gestión de Massa, el reajuste por movilidad para los 7.200.000 jubilados nacionales y pensionados fue del 89% con una inflación interanual de alrededor del 115%», expresó el especialista y agregó: «Hay un sistema político que hace caso omiso a lo que pasa en la seguridad social».
El problema del bono a los jubilados
«El bono que es un pago en negro, porque es una suma no remunerativa que no se cuenta para aplicar la movilidad y no entra en el cálculo del aguinaldo, La usaron todas las administraciones, antes se usaba previo a una elección o se usaba cuando la fórmula daba un muy mal número, un par de meses. Ahora, Massa lo convirtió en política de Estado, es decir, hace un año que en forma consecutiva se está dando el bono«, disparó Semino.
«El bono es discrecional porque lo da el funcionario que quiere y si quiere no lo da. Nosotros lo tenemos cuestionado esto judicialmente, porque como es obvio al darlos en forma sistemática, tiene que ser considerado como lo es los trabajadores activos, parte integrante de los activos del sueldo y del haber«, remarcó el presidente de la Sociedad Iberoamericana de Gerontología y Geriatría (SIGG).
«En este momento están entrando 800.000 nuevos jubilados por vía de la moratoria. Vamos a tener prácticamente entre un 85 y 90% de jubilados que van a tener un haber mínimo, que nada tiene que ver con su historia laboral y nada tiene que ver con lo que representaron socialmente. Lo que tenemos en la Argentina es un programa de subsidios por edad. Vos llegas a los 60 o 65 años y el funcionario que esté a cargo de la administración del Estado te va a dar algo que no tiene que ver con todo lo que señalaba anteriormente», sentenció Semino.
¿Cómo se financian las jubilaciones?
«Lo que tenemos en la Argentina es un sistema de reparto que es asistido, la mitad proviene del trabajo, cargas y contribuciones, de esa mitad, el 50% no aporta, es decir, tenemos un 45 o 50% de trabajo no registrados. De la otra mitad, hay trabajadores que aportan, pero sus sueldos son bajos (monotributistas), por lo cual el aporte también es pequeño. Del aporte fiscal, lo único que está entrando extra es lo que aporta el más regresivo de los impuestos que es el IVA, que pone el 11% mensual», comentó el presidente del Parlamento de la Tercera Edad de la Ciudad de Buenos Aires.
«Lo que hay que discutir y estuvo ausente aún en la propia campaña electoral es cómo estructurar un sistema que sea realmente sustentable, que tenga financiamiento genuino, y obviamente resolver la informalidad en el campo laboral, porque esto es inadmisible. Esto es ver cómo resolver la estructura, pero a su vez, cómo palear las situaciones actuales», concluyó.
