Jayme Perczyk, ministro de Educación, manifestó que arancelar la educación pública como quieren los libertarios es un retroceso, ya que en la dictadura se utilizaban estos métodos que desalentaban la participación de los ciudadanos en el nivel educativo superior. Por otro lado, Perczyk se mostró en contra del sistema de vouchers que propone Javier Milei y dijo que las escuelas no son comercios y afirmó que todas deben mejorar y no competir.
«No me gusta conceptualmente el sistema de vouchers ¿Por qué las escuelas tienen que competir entre sí? Si nosotros tenemos que mejorar todas. Tienen que estar mejor porque a todas van nuestros hijos. Por otro lado, ya hubo arancel en la dictadura. La democracia sostuvo a la universidad pública gratuita y logró sacar los aranceles. La verdad que lo que están planteando (los libertarios) es retroceder», indicó Perczyk en una entrevista para Radio 10.
«Los vouchers de educación no funcionan. En Chile lo hizo la dictadura de Pinochet, también se implementó algo parecido en Ohio, Luisiana, Indiana y Washington. A la salida de la pandemia en las escuelas que tenían ese sistema, la caída de los aprendizajes de los pibes fue el doble que en los demás distritos de Estados Unidos. En Suecia lo que provocó fue una inflación de notas, porque como los chicos dejan de ser estudiantes y pasan a ser clientes, hay que atraerlos de otra manera…, entonces lo que hicieron fue regalar notas para atraer a nuevos alumnos», aseguró el funcionario nacional.
La contracara del modelo educativo de Javier Milei: más Estado e inversión pública
«Nosotros creemos que una de las medidas más igualadoras en términos de educación es que todos los chicos vayan a la sala de cuatro y vayan a la sala de tres y para eso hay que hacer jardines, hay que designar maestros, hay que sostener los jardines, comprar y distribuir libros, juegos, plazas de juegos, eso es una inversión muy grande en términos de igualación social», comentó Perczyk.
«Hay que sostener los programas de becas, no podemos permitir que un pibe que tiene alguna dificultad no haga lo que quiere en la escuela o en la educación superior porque le faltan unos mangos…, el Estado tiene que estar atrás para que los pibes puedan realizar su vocación», sentenció el exsecretario de Políticas Universitarias de la Nación.
«Hay que mejorar la escuela primaria, fortaleciendo lengua y matemática, extendiendo la jornada. Nosotros llegamos ahora a incorporar una hora de clase en el 82% de las escuelas y hay que seguir trabajando en eso, en infraestructura, garantizar los libros y la conectividad en las escuelas primarias públicas», insistió el dirigente político que actualmente está de licencia como Rector de la Universidad Nacional de Hurlingham.
«Una clave es la duplicación de la escuela técnica, nosotros tenemos hoy 1.500 escuelas técnicas y 700.000 alumnos, pero hay que duplicarlo en 10 años y eso requiere una inversión muy grande, gestión y compromiso. Necesitamos políticas para la universidad también, carreras cortas con salida laboral, incorporar robótica y programación en la escuela secundaria. Hay que estudiar con libros y también con computadoras», concluyó el dirigente de Unión por la Patria.