La Justicia de Nueva York falló esta semana contra la Argentina en el juicio por la expropiación de YPF en 2012, durante la presidencia de Cristina Kirchner y la gestión de Axel Kicillof en el Ministerio de Economía. El dictamen podría costarle unos US$ 16.000 millones al Estado Nacional. En este sentido, Juntos por el Cambio arremetió contra el exfuncionario y actual gobernador bonaerense, al sostener que, a raíz de ese fallo, “tiene que renunciar” e “irse a su casa”.
El encargado de manifestarse al respecto fue el senador bonaerense por Juntos por el Cambio Joaquín de la Torre. En declaraciones a CNN Radio, el dirigente cercano a la candidata presidencial Patricia Bullrich consideró que “lo lógico sería que alguna vez los políticos se hagan cargo de sus decisiones”. “En este caso, la decisión de un señor soberbio que encima estuvo haciendo chistes con el tema en aquel momento, que hoy sigue convencido que hizo bien, le va a salir caro a todos los argentinos”, aseveró.
Y agregó: “Después del 10 de diciembre se va a ir a su casa en Parque Chas, desgraciadamente sin ningún remordimiento respecto a eso. Quiero agregarle a esto, el presidente del Tribunal de Cuentas en la provincia de Buenos Aires, o sea, el que mira las cuentas de los bonaerenses, de los funcionarios bonaerenses, fue responsable legal de esa decisión. Yo, si me tocara eso, yo ya hubiera renunciado. Lo que tiene que hacer es renunciar. Se tiene que ir a su casa”, sostuvo.
“Ese señor no está en condiciones morales de seguir ejerciendo ese cargo”, ahondó De la Torre. A lo cual, recordó: “Yo me opuse a su nombramiento en mayo del año pasado cuando renuncié al cargo con el cual me presentaron que era vicepresidente segundo de la Cámara”. Asimismo, vaticinó que “no tiene buenos números para ser gobernador de la provincia, va a perder”.
Metiéndose ya en los comicios generales del próximo 22 de octubre, De la Torre dijo: “Ganó por tres puntos y va a perder. Porque la gente va a creer, como ya quedó demostrado en la elección, que no sigue siendo gobernador. Tenemos la obligación, los políticos, de no dejar que La Cámpora tenga una cueva donde esconderse en la provincia de Buenos Aires. Todas las decisiones que va tomando el Gobierno en este momento van a hacer caer la boleta de Unión por la Patria”, sentenció.
