Los cuatro países vecinos de la Argentina que comparten el uso de la Hidrovía Paraná-Paraguay volvieron a reclamar que se deje de lado el cobro de peajes. Presentaron ante una instancia regional que regula este curso de agua su reclamo contra ese canon a los buques que aplica el Gobierno nacional, a través de la Administración General de Puertos (AGP), desde enero último.
Representantes de Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay presentaron el reclamo contra la Argentina ante la XLIX Reunión del Comité Intergubernamental de la Hidrovía Paraguay-Paraná que se juntó el miércoles en su sede en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia. El Comité se conforma dentro del Tratado de la Cuenca del Plata y las novedades desde allí no son alentadoras para la Argentina.
Es que el país está bajo amenaza de juicios de arbitraje y demandas ante la Organización Mundial de Comercio (OMC). Frente al reclamo de los países vecinos, el Gobierno no hizo oídos sordos y se escudó. Los ministros de Transporte de la Nación, Diego Giuliano, y de Relaciones Exteriores, el canciller Santiago Cafiero, defendieron el sistema como parte de una serie de obras que hace la Argentina en la zona que administran y se niegan a suspenderlo.
El reclamo contra la Argentina
La presentación contra Argentina se produjo tras la visita del ministro de Economía y candidato presidencial del oficialista Unión por la Patria, Sergio Massa, al flamante presidente paraguayo Santiago Peña. Los cuatro países manifestaron su “especial” y “grave preocupación” por los peajes para la circulación de embarcaciones y el control de algunos hechos “ilícitos”, como parte de la mejora en las “condiciones de navegabilidad y seguridad”.
En este sentido, manifestaron que Argentina estableció el peaje sin el consenso de los países que participan el Acuerdo de la Hidrovía y que “contraviene entendimientos y las prácticas regionales” sobre la utilización de la misma. Por eso pidieron “suspender la aplicación” de las resoluciones que en 2022 aprobó el Ministerio de Transportes de Argentina y le reclamaron “las medidas necesarias” para el cumplimiento del Acuerdo de Santa Cruz de la Sierra, de 1992.
Antecedentes del conflicto
El peaje que aplica la AGP entre los puertos de Santa Fe y Confluencia mantiene en tensión la relación con Paraguay porque la mayor parte de barcazas tienen bandera de ese país. Pero también hay reclamos fuertes desde Brasil, dueño de barcos paraguayos a los que retuvieron e incluso multaron. Los buques que vienen de puertos fuera de la Argentina deben pagar US$ 1,47 por tonelada (tn) de carga registrada y $ 1,47 por tn si salen de puertos nacionales.
En la AGP derivaron las negociaciones sobre el conflicto a la Cancillería porque dijeron que ellos no llevan los reclamos. Por otra parte, sostuvieron que las partes “reconocieron que lo que estamos discutiendo (los argentinos) es si la obra y la inversión justifica la tasa, que es distinto de lo que se viene discutiendo”, que es pagar o no el peaje, que la Argentina va a seguir cobrando, consignó NA.