Daniel Epstein, uno de los asesores presidenciales de Javier Milei, confesó una posible marcha atrás con la dolarización si el candidato presidencial llegase a asumir al Poder Ejecutivo. «No vamos a dolarizar si no hay dólares», mencionó sobre una de las propuestas que más peso tiene en La Libertad Avanza.
Según NA, especialista en mercados financieros expuso sobre la pérdida de valor del peso y cargó contra la «máquina de imprimir billetes» del Banco Central (BCRA). Pero cuando se le consultó de dónde iban a sacar las divisas, respondió: «Javier Milei tiene una propuesta muy concreta. Es tan concreta que no vamos a dolarizar si no hay dólares».
Epstein insistió, además, en que «la política es la responsable» de la crisis y dijo que La Libertad Avanza tiene un plan que «puede tardar dos años» para cambiar planes por trabajo. Y agregó: «Lo más importante es que no puede haber déficit fiscal». Al hablar de la principal propuesta económica de Milei, Epstein sacó de sus bolsillos un billete de un dólar que tomó con la mano derecha y $700 pesos que sostuvo con la izquierda.
Defensa de la dolarización
Sin embargo, aseguró que los pesos son «papel pintado que nadie quiere». Destacó que en un posible gobierno de Milei le permitirán a los trabajadores «preservar el valor» de sus salarios, en una clara defensa de la dolarización. La propuesta, de todas formas, sigue generando controversia incluso entre los propios economistas.
«Estamos trabajando en un proceso donde lo más importante para dolarizar, que tiene sus defectos también eh, no sólo virtudes; lo más importante es que no puede haber déficit fiscal porque si cierro el grifo de la emisión monetaria y tengo dólares y no tengo crédito y tengo déficit, no cierra», explicó en un encuentro sobre «Democracia y Desarrollo».
Cuando le consultaron cuánto tiempo cree que podría llevarle a Milei plasmar esa propuesta, Epstein señaló que «el paso uno, fundamental, es que el gasto público no puede ser superior al ingreso» e insistió en «ir al déficit cero». También remarcó que «cualquiera que sea electo presidente y asuma el 10 de diciembre, va a tener que trabajar muy fuerte en reducir el gasto». A su vez, admitió que «probablemente esa reducción del gasto sea recesiva, porque acá no hay milagros».