Un verdadero revuelo. Eso fue lo que se generó en las últimas semanas en torno a Maju Lozano, una de las conductoras más importantes del mundo del espectáculo de nuestro país, que ha sabido muy bien de qué manera consolidarse en la pantalla chica. Sin embargo, sus declaraciones generaron polémica.
Esto tiene que ver con lo que comunicó antes de irse de “Todas las Tardes”, el programa que llevaba adelante a través de la pantalla de Canal Nueve. Allí, aseguró que fue diagnosticada con autismo. Desde Socios del Espectáculo, el programa que llevan adelante Adrián Pallares y Rodrigo Lussich en Canal Trece, fueron a buscar la palabra de la protagonista.
“Nos sorprendiste con la despedida, no muchos sabíamos”, le dijo el cronista. “Algunos sí sabían porque desde noviembre del año pasado yo lo venía hablando”, aseveró. “¿Viste que nacen los especialistas, los críticos… ¿te dolieron los comentarios?”, le preguntó el notero directamente sobre lo que contó sobre su diagnóstico de autismo.
“No voy a hablar de eso, no tengo nada que decir, no me duelen, las redes me chupan un huev*”, arremetió sin pelos en la lengua. Por último, le preguntaron sobre su reemplazo. “Karin Cohen, ¿te cae bien?”, indagaron. “La amo, me cae genial, de hecho, el año pasado me la crucé en el canal, me gusta ella”, sentenció.
Lo que había contado
“Este es un día particular, hermoso, estoy un poco nerviosa. Soy una persona extremadamente sensible y muchos de los temas que pasaron por Todas las tardes me estaban afectando demasiado y llevando puesta. Me estaban llevando hacia un lugar que yo no quiero recorrer y que no me siento identificada. A mí me gusta hacer humor, siento que ya no estaba siendo feliz”, afirmó.
“Hace un tiempo muy largo vengo transitando un momento personal. No quiero llorar porque no es algo triste, es algo que gracias a Dios trajo mucho alivio a mi vida, a la de mis amigos y mi familia. En un momento pensé que era adoptada. Desde que era muy chica sentí que era un mundo en el que yo no pertenecía, que no había grupos en los que yo me identificaba. Me sucedían cosas que no entendía, como no tolerar el color rojo, no poder comer frutillas, no poder comer arándanos, no poder ponerme ropa roja”, aclaró Maju Lozano en su momento.
“El 5 de mayo es el día de mi nuevo cumpleaños como me dijo mi terapeuta. Tuve el gran alivio porque para mí solo fue felicidad, alivio y entendimiento comprender que todo esto que venía sintiendo tenía una explicación. Fui diagnosticada de autista. Soy autista. Para mí fue volver a nacer, reconstruir 51 años de dudas, de buscar explicaciones donde no las había. No quiero explicar el autismo, es algo que todavía estoy aprendiendo. Me parece que lo más importante es que ya no estoy más rota, siempre me sentí una persona rota”, finalizó.