El billete de $2000 lleva en circulación cuatro meses desde que se lanzó el pasado 22 de mayo. Sin embargo, hay muchos cajeros automáticos que no están actualizados para leer el billete complicando la operatoria. Por eso, muchos de ellos los rechazan a la hora de hacer depósitos bancarios, lo cual es un nuevo dolor de cabeza para los ciudadanos.
Adicionalmente, el aumento de la inflación y la nominalidad exige mayores niveles de extracción diaria. Pero dada la baja denominación de los billetes, a las operaciones de extracción hay que repetirlas dos o tres veces, lo que genera un mayor desgaste y que las máquinas se rompan más rápido.
Cuáles son los problemas en los cajeros automáticos
Al momento del depósito pasa algo similar: los cajeros automáticos tampoco leen los billetes de $2000. Las personas al depositar lo desconocen, hacen la cola en el cajero, se encuentran con la imposibilidad de completar la operación porque no les toman los billetes y deben ir a hacer la fila a la caja. Adicionalmente, los bancos suelen exigir un monto mínimo para depósito y, si no lo superan, dan cambio y envían nuevamente al cajero de autoservicio. Toda una perdida de tiempo para los usuarios y de sobrecostos en la operatoria.
Las terminales que expenden dinero se vacían rápidamente y las máquinas se averían con más frecuencia por el uso. Además, las bocas de expendio pueden contar hasta cierta cantidad de billetes, más allá del límite de extracción diario que tenga el cliente. Esto lleva a repetir la operación varias veces, de acuerdo con la nominalidad de los billetes que tenga disponible el cajero.
“Eso depende de cada banco, la marca o la tecnología del cajero. En nuestro caso, demora algunos meses la implementación del billete nuevo. Esto es porque tenemos que mandar al fabricante el modelo y generar el software adecuado para adaptar el cajero. Por el momento, no estamos cargando con billetes de $2000 porque no los reconocen nuestros cajeros, pero en breve lo harán. Es un proceso habitual, lo mismo sucede con el nuevo billete de $1000?, explicaron desde un banco privado.
Otra voz del sector bancario confirma que «no es un proceso fácil el de adaptación de terminales» y señala, por otro lado, que no hay tampoco muchos billetes de $2.000 en circulación. En contraposición, desde el Banco Central (BCRA) aseguraron que “los billetes de $2.000 funcionan perfecto en los cajeros” y que “puede haber alguna máquina de alguna entidad que aún no se actualizó, pero sería un caso puntual”.