Después de que se conociera la noticia de que Pampita iba a ausentarse unos días del Bailando 2023, el programa de Marcelo Tinelli donde ella se desempeña como jurado, se supo que la encargada de reemplazarla sería Zaira Nara. En los últimos días, la modelo quedó en el ojo de la tormenta debido a que la novia de su padre, Alicia Barbasola, la denunció de haberla censurado.
Sucede que la rubia ha estado presente en algunas emisiones, pero ahora le habrían pedido que no asista al estudio. Así lo contó la novia de Andrés Nara en sus LAM, el ciclo de Ángel de Brito. «Estoy triste, muy angustiada. El lunes, invitada por la producción, fui al programa en vivo. Y después me dijeron que me quede para el programa grabado», lanzó.
«Pero que después del miércoles que no vaya y que vuelva la semana siguiente. Termina el programa, me voy al baño para cambiarme para la grabación, vuelvo al piso. Y se acerca de nuevo la productora que me había hablado antes y me dice: ‘Te tenés que ir, por pedido de Zaira te tenés que ir del piso’. Para evitar cualquier situación, me fui. Y dije que volvía el miércoles. Y me dicen que no, me dijeron que estoy prohibida toda la semana», apuntó Barbasola.
«Salgo y me quedo en el pasillo donde están los baños. Y el de seguridad me dice: ‘Vamos, vamos, te tenés que ir’. Yo le pedí que por favor me esperaba que me pasaran a buscar. Eran casi la 1 de la mañana, pedí que me dejaran esperar en el lugar. Me quedé ahí esperando. Y al rato vienen tres de seguridad diciéndome: ‘Vamos, vamos, afuera, tenemos una orden de arriba’», disparó.
La respuesta de la modelo
Ante semejante acusación, Zaira Nara no se quedó callada y brindó un móvil con el mismo programa de espectáculos. «No es verdad. Sí sé que hay un montón de gente que está trabajando acá, y para mi venir acá es un trabajo también. Si bien me encanta estar en el Bailando, en el streaming y todo, para mi es un trabajo y no soy de poner pretensiones de ese tipo. Ni tampoco soy de sacarle el trabajo a nadie, menos a mi papá, si es que le sirve para algo venir acá», apuntó.
«La verdad que de cinco días de la semana preferiría que el único que vengo, no haya un encuentro así, pero porque soy más de resolver las cosas en privado. Y si hay algo que charlar, me parece que no es el lugar. Sí, obvio que preferiría que no sea acá y no lo pedí. Pero si alguien de mi entorno lo pidió, que no creo porque yo no se lo expresé a nadie, no sería errado. Se cae de maduro que a mi no me saldría una situación cómoda ponerme a charlar acá. Es un tema que me parece que yo prefiero resolverlo en privado», dijo.